Cuarenta años después de su primer y único paso por París, el Mundial de karate regresa a la capital francesa desde hoy hasta el domingo. El Palais Omnisports de Bercy durante cinco días será el escenario de las pruebas en esta disciplina que aspira a entrar en el programa de los Juegos Olímpicos de 2020.

El primer Mundial de karate tuvo lugar en 1970, en Tokio. Dos años después, fue París la que organizaba el evento. Desde entonces, los competidores nipones son los que han coleccionado un mayor número de títulos, en 20 ediciones.

Para los 700 participantes de unos 100 países habrá 16 títulos entre el combate (kumite) o en kata, o karate de postura, una prueba a la vez técnica y coreográfica que consiste en un combate imaginario.

El karate aspira a entrar en el programa olímpico y la próxima oportunidad le llegará en febrero de 2013, cuando sea anunciado el número de plazas a tomar por los nuevos deportes para los Juegos de 2020. Después llegará la candidatura oficial y el veredicto en junio.

Los japoneses, terceros en el Mundial de Belgrado en 2010, precedidos en el tablero de medallas por serbios e italianos, estarán en París para reconquistar su título de 2008. Ese año, ante su público, consiguieron cuatro coronas mundiales y precedieron a franceses e italianos en la clasificación.

En casa, Francia querrá confirmar su buena actuación del Europeo de 2012 en Tenerife (España), donde logró once medallas, quedando segunda detrás de Italia, en el medallero final.

Entre los participantes estarán los ecuatorianos Jacqueline Factos y Daniel Viveros. Factos es la mejor exponente en su rama en esta disciplina y está ubicada en el top ten mundial, mientras Viveros fue campeón panamericano el año pasado en los Juegos desarrollados en México.

Hoy iniciarán las competencias en su fase de eliminatorias en la rama masculina de la categoría de +84 kg en kata individual y mañana será el turno para las damas en +65 kg.