La piloto ecuatoriana Francesca Cozzaglio no logró su propósito de subir al podio en el Campeonato Mundial de Karting Rotax Max Challenge, como era su anhelo cuando partió de suelo ecuatoriano hasta los Emiratos Árabes.

Sin embargo, la clasificación a la final del certamen, alcanzada en forma directa al ubicarse en el puesto 16 en las carreras preliminares en las que compitió con 72 pilotos divididos en dos series, fue producto de su inteligente y técnico manejo sobre la pista Al Alain (Abu Dhabi), en donde ocupó importantes posiciones entre el decimosegundo, decimoprimero y octavo lugar en los tres hits corridos frente a 36 pilotos.

Formó la grilla de partida en la decimosexta posición y disputó la prefinal de 11 vueltas al circuito, concluyendo en la posición 28, luego de sufrir un choque que la sacó de la pista en la segunda vuelta.

“Arrancan como locos y en la segunda vuelta me pasaron llevando y me sacaron de la pista, pero pude continuar. No creo que en eso haya primado mi condición de mujer y latinoamericana, son cosas que ocurren en este deporte”, sostuvo la  piloto juvenil.

En la final, que constaba de 18 vueltas, Francesca partió de la posición 28, pero escaló varios puestos, demostrando sus habilidades hasta arribar a la meta.

Francesca Cozzaglio, única mujer piloto en el campeonato, concluyó su participación en el puesto 22 de la categoría junior, pero fue la mejor ubicada de los participantes sudamericanos y latinoamericanos, superando a colombianos, venezolanos, argentinos, brasileños, mexicanos y centroamericanos, detrás de dos  canadienses.

La  ecuatoriana se mostró satisfecha por su actuación, pues tuvo un alto desempeño. “Estoy feliz con lo que pude hacer. Como todos, quería ganar, pero creo que los resultados son muy buenos y la experiencia ganada es invaluable”, aseguró en diálogo con FANÁTICO.

La preparación para el certamen la cumplió en Miami, a donde viajó en compañía de su madre. Su mecánico Mike fue el encargado de preparar un panorama similar al del campeonato mundial, con temperaturas altas y otros aspectos. Concluido este capítulo, en compañía de su padre y del piloto Juan José Rivera, además de su mecánico, se desplazó hacia territorio árabe.

Uno de los primeros pasos fue la adaptación a la diferencia horaria y tratar de lograr una buena aclimatación. No pudo entrenar el primer día, porque la pista estaba siendo revisada; luego se realizó el sorteo de los chasis. El que le correspondió le gustó mucho. “Reaccionó bastante bien, aunque el auto tiene mucho freno para la pista”, comentó.

Luego se refirió a los preliminares ya expuestos y tras el campeonato aseguró haber recibido invitaciones de pilotos y entrenadores de varios países, porque -al parecer- el hecho de ser la única mujer en la categoría, además de sus grandes condiciones para el manejo, así como su magnífico desempeño, impactaron mucho, porque en la historia del Mundial Rotax Max Challenge hay un número bajo de mujeres que haya llegado a la final y  ocupado importantes ubicaciones en la clasificación y en la final, como lo hizo Francesca.

“Haber viajado al otro lado del mundo, experimentar otras vivencias en un país en donde hay mucho dinero y gran tecnología, es algo que realmente no tiene comparación”, manifestó la internacional piloto del Team Totto.

“Compartir la pista con más de 72 pilotos y ser la única mujer fue algo muy especial; además, la presión crece, pero lo único en que pensaba era en dar la mejor imagen y representar a mi país con gran orgullo”, expresó.

Abu Dhabi quedó atrás. La vida de la deportista transcurre en forma normal. De vuelta al país, retomó sus labores estudiantiles en el colegio Alberto Einstein. Se juntó con sus amigas para  contarles su experiencia, aunque no le agrada mucho hacerlo, solo lo hace cuando se lo solicita  alguna curiosa compañera.

Compartir bromas, disfrutar de los recreos en donde se entera de las últimas ocurrencias del grupo, además de chatear en su BlackBerry, son actividades propias de una joven y tranquila estudiante, que no se ha envanecido por los éxitos alcanzados en el deporte y, que por el contrario, se muestra reservada y no le gusta presumir ni es pedante, según destacan quienes la rodean.

Por el momento, su participación en los certámenes provinciales y nacionales ha llegado a su culminación en  2011.
Ahora se encuentra a la espera de una nueva temporada, aunque lo hará en otra categoría, sin descartar el automovilismo deportivo, fuera de los linderos patrios, ya que durante su estadía en los Emiratos Árabes ha recibido varias invitaciones para pilotar un auto de competencias.