La Unesco amplía su protección al bien patrimonial
La Unesco amplió el listado de patrimonio inmaterial sujeto a protección al incluir 35 manifestaciones culturales de los cinco continentes e inscribió dos estrategias en su registro de buenas prácticas para la salvaguarda.
En su XIV Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, que se lleva a cabo en Bogotá, el organismo tomó la decisión de incluir 35 candidaturas, entre ellas expresiones de España, México, Bolivia, Brasil, Perú y República Dominicana.
El Comité está compuesto por representantes de 24 Estados Partes en la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial (2003) y se reúne una vez al año para supervisar la aplicación de este instrumento jurídico ratificado por 178 Estados.
Entre los incluidos están la fabricación artesanal de cerámica de estilo talaverano de las localidades españolas de Talavera de la Reina y Puente del Arzobispo y de los estados mexicanos de Puebla y Txalaca.
El comité valoró en su decisión que “los procedimientos de fabricación, decoración y esmaltado de este tipo de cerámica siguen siendo artesanales e idénticos a los practicados en el siglo XVI”.
Al respecto, el ministro de Cultura y Deporte en funciones de España, José Guirao, destacó que “por primera vez la lista de la Unesco reconoce explícitamente el fuerte vínculo cultural que une a América Latina con España y contribuye a impulsar la cooperación internacional entre las naciones”.
La Unesco también incluyó las danzas contemporáneas peruanas de “Hatajo de negritos” y “Las Pallitas”; la música negra “Gnawa”, de Marruecos, y la festividad boliviana del Señor Jesús del Gran Poder en la ciudad de La Paz el día de la Santísima Trinidad.
“Es un reconocimiento de la importancia del Gran Poder, ya no solo para los paceños, sino a nivel mundial. Pero ese reconocimiento, también nos genera obligaciones, ya que parte de la carpeta explica el Plan de Salvaguardia que asumimos como Estado en los distintos niveles para darle cumplimento”, dijo el secretario municipal de Culturas de La Paz, Andrés Zaratti.
La Unesco añadió además la práctica del “then” de los grupos étnicos Tày, Nùng y Thái (Vietnam); el arte tradicional turkmeno de tejer alfombras; la cerámica pintada de Kosiv (Ucrania); “Lazgi”, danza de Coresmia (Uzbekistán); el tiro con arco tradicional en Turquía, y el masaje tailandés “Nuad Thai”.
De la lista también hacen parte la Rosa de Damasco y las prácticas artesanales de la localidad de Al-Mrah (Siria); las procesiones de Semana Santa en Mendrisio (Suiza); el Drotárstvo, práctica artística y artesanal con alambre de Eslovaquia; la estera fina “Ie Samoa”, y el carnaval de Podence (Portugal).
La Unesco incluyó además la práctica de la danza y la música tradicionales del Valle de Setesdal (Noruega); Kwagh-Hir, representación teatral de Nigeria; el silat (Malasia); conocimientos y técnicas tradicionales relacionadas con la confección artesanal y el uso del Ak-kalpak (Kirguistán), y la celebración del perdón Celestiano (Italia).
Asimismo fueron inscritas la práctica del arpa irlandesa; la oferta de servicios y hospitalidad durante la peregrinación del Arbain (Irak); el “pencak-silat” (Indonesia); los conocimientos técnicos tradicionales sobre la fabricación y práctica del Dotār (Irán), y el alpinismo (Francia, Italia y Suiza).
La expresión “Bumba-meu-boi” del estado brasileño de Maranhão también fue añadida a la lista al ser un “un elemento del patrimonio cultural vivo (...) que agrupa diferentes formas de expresión musicales, coreográficas, teatrales y lúdicas en las que la figura del buey encarna la relación de los participantes en el rito con el ámbito de lo sagrado”.
El listado de manifestaciones incluidas esta semana lo engrosan la Epifanía etíope; el canto bizantino (Grecia y Chipre); la morna, práctica musical de Cabo Verde; el procedimiento tradicional de preparación del “airag” en un “khokhuur” (Mongolia), y el “Ommegang” de Bruselas.
Lo completan el carnaval de Pondence de Portugal, los conocimientos vinculados al cultivo y explotación de la palma datilera (Arabia Saudí, Bahrein, Emiratos Árabes Unidos, Egipto, Irak, Jordania, Kuwait, Marruecos, Mauritania, Omán, Palestina, Sudán, Túnez y Yemen); la transhumancia, desplazamiento estacional de rebaños por rutas migratorias del Mediterráneo y los Alpes (Austria, Grecia e Italia) y el arte armenio de la escritura. (I)