Artistas analizan efectos del covid-19
Las pérdidas económicas en el sector cultural del país por la pandemia, tan solo en el mes de marzo superan los 11 millones de dólares. La cifra se toma del informe de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (Cisac).
Frente a esta realidad y con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco); la Universidad de las Artes, la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) y la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CCE) núcleo del Azuay, se ejecutaron desde el miércoles 17 de junio hasta la fecha una serie de debates enfocados en las economías culturales y la reactivación de las cadenas de valor.
En el diálogo participa la economista Gabriela Montalvo, quien resalta otro estudio sobre la afectación para el sector de las artes y del entretenimiento, el cual indica un 46 % de pérdida respecto al año anterior sobre la base de la recaudación del IVA.
“Pero estamos dejando por fuera a todos los artistas que no tributan y lo cultural es lo que nos hace humanos, tenemos que entender eso”, dice.
Por su parte, Mariana Andrade, presidenta de la Corporación de Productores y Promotores Audiovisuales del Ecuador (Copae), sostiene que existe un virus mayor al covid-19 que los ataca desde hace muchos años atrás y ha sido muy perjudicial.
“Nos enferma muchísimo y es la sociedad que no entiende nuestro trabajo, que piensa que somos vagos y mantenidos por el Estado, eso provoca una deshumanización de las industrias culturales y creativas”.
Andrade afirma que la sociedad se acostumbró a que el sector cultural sea resiliente, pero con la llegada del coronavirus su lucha los “deja muy debilitados en la producción, investigación y todos los procesos que incluye”.
La artista escénica Tanya Sánchez Ribadeneira plantea como solución, que la cultura sea asignada en el país como un derecho para que se le dé la misma atención que se le brinda a las áreas de la salud y la educación en Ecuador.
“Para mí es imposible asumir este fomento a la demanda, sin que desde el Estado se asuma esta corresponsabilidad, concebir el consumo y la producción cultural como un derecho”.
Así detalla que los artistas serán demandados, al igual que los médicos para garantizar el derecho a la salud, en ese caso a su derecho a la cultura.
Sánchez argumenta que el sector cultural tiene una lucha diaria en el sentido de que le toca convencer a determinados sectores, de que el arte es necesario para el desarrollo del país
“De ninguna manera nosotros tratamos al público como nuestro cliente, no queremos que nuestros contenidos sean objeto de consumo, le entregamos a ellos la calidad de ser sujetos de derechos”.
En lo que todos coinciden unánimemente, es que la migración al mundo digital ha resultado favorable. (I)
Organismo internacional pide debatir sobre las necesidades
El cierre total de las instituciones culturales en 128 países y parcial en otras 32 naciones, motivó a la Unesco a tomar iniciativas que garanticen los derechos sociales y económicos de los artistas a través de los debates llamados Resiliart.
Audrey Azoulay, directora general de la Unesco, subrayó la necesidad de garantizar los derechos sociales y económicos de los artistas y que ocupen el lugar que merecen en los debates políticos y sociales de los países.
“Todo el mundo habla de abrir la economía. Somos parte de esta. El dinero que aportamos es significativo”, dijo la cantautora Angélique Kidjo. (I)