"La decisión" rompe esquemas de la guerra
El 30 de diciembre de 2006, solo unos minutos después del ahorcamiento de Sadam Husein, una mujer bomba entra en la estación de tren de Bagdad dispuesta a hacerla saltar por los aires.
Así inicia La decisión, la primera película iraquí estrenada en ese país en 27 años y que ahora llega a España.
Su director, Mohamed Al Daradji, estudió cine en Leeds (Reino Unido), pero en 2003, el año de la invasión liderada por EE.UU., regresó a su país y desde entonces ha producido cuatro largometrajes de ficción y varios documentales.
La decisión es el primero estrenado comercialmente en las salas iraquíes.
“La cultura del cine ha sido destruida en Irak”, aseguró a EFE el cineasta, en una entrevista telefónica desde Bagdad.
En 1991, con la primera guerra del Golfo, se cerraron todos los cines y en 2003 se terminó de liquidar lo poco que quedaba, explica.
Su segunda película, Hijo de Babilonia (2009), aclamada por la crítica y que relataba la búsqueda de una mujer kurda de los restos de su hijo, se proyectó ante un millar de personas en el Teatro Nacional de Bagdad.
La guerra es el contexto de todo su trabajo. Hasta ahora Daradji se había centrado en las víctimas, y en La decisión da un paso adelante: ponerse en la piel de una terrorista suicida para retratar sus dudas.
La acción transcurre en tiempo real. El momento elegido, la madrugada en que fue ejecutado el dictador.
El origen de este proyecto se remonta a 2008, cuando el cineasta leyó un artículo que trataba sobre una mujer bomba que entraba en una estación de policía con el objetivo de confesar sus intenciones, cinco minutos antes de que la bomba fuese explotada.
Los agentes la desnudaron y ataron a una verja para humillarla en público. Tenía 16 años.
Fuera de Irak las reacciones han sido positivas en general, Daradji señala que para los iraquíes es más difícil. “Se ha sufrido mucho por el terrorismo, la gente no quiere pensar en ellos como seres humanos”, subraya. (I)