La fiscal general de California, Kamala Harris, intentará convertirse este año en la primera senadora de origen indio del país, iniciativa que fue aplaudida este lunes por una de las principales asociaciones de indios-estadounidenses.

Harris aspira a ganar en los comicios del 8 de noviembre el escaño de la demócrata Barbara Boxer, que se jubila después de ocupar el cargo desde 1993.

De lograrlo, será la primera persona de origen indio en ocupar un asiento en la Cámara alta del Congreso estadounidense, de acuerdo con el Comité de Acción Política Estados Unidos-India (USINPAC, por sus siglas en inglés), que representa a más de 3 millones de indios-estadounidenses.

Harris inició oficialmente su campaña el 24 de febrero al presentar toda la documentación ante una oficina electoral del condado de Los Ángeles.

Su estrategia para llegar al Senado incluye "luchar por los derechos de nuestros hermanos y hermanas de la comunidad LGBT, lograr una reforma migratoria y proteger los derechos que tiene una mujer sobre su propio cuerpo", de acuerdo con la demócrata, citada en un comunicado de USINPAC.

Harris, de 51 años, es la fiscal general de California (oeste) desde 2011. Comenzó su carrera política en 1990 como fiscal del distrito adjunta del condado californiano de Alameda y a partir de 1998 ocupó distintos cargos públicos en San Francisco.

Su madre es la oncóloga Shyamala Gopalan Harris, que emigró de Chennai (sureste de India) a Estados Unidos en la década de 1960, y su padre es el profesor de Economía en la Universidad de Standford Donald Harris.

Los estadounidenses elegirán el 8 de noviembre a su nuevo presidente y renovarán toda la Cámara de Representantes, parte del Senado y una decena de gobernadores. (I)