Los ronquidos pueden silenciarse con una cirugía
A los 6 meses de vida, Mateo Silva comenzó a roncar, respiraba por la boca y eso le generaba un sueño carente de tranquilidad.
Sus padres se inquietaron por esa dificultad y en la consulta médica indicaron el particular al pediatra.
Tras varios análisis, el profesional determinó que la causa era el aumento en el tamaño de las adenoides (tejidos linfáticos en las vías respiratorias).
Cuando cumplió los 2 años de edad le realizaron le extranjeros esos órganos con lo que su descanso fue mejor. Dejó de respirar con la boca mientras dormía.
El otorrinolaringólogo Fernando Sancho cuenta que este problema se presenta, sobre todo, en personas adultas, que no son conscientes del inconveniente.
Los tejidos se relajan cuando las personas aumentan de tamaño y volumen. “Van perdiendo tono, son más fláccidos y volátiles”.
El problema es multifactorial y puede reponder a desórdenes neurológicos, que generan apnea del sueño (dejar de respirar por segundos).
Otra causa es el sobrepeso. Las paredes de la vía aérea se estrechan y al engrosarse vibran y suenan.
La deformidad mandibular llamada retrognatismo (mentón pequeño) estrecha la parte posterior de la vía aérea y genera ronquido.
Este problema suele presentarse por una obstrucción en la parte anterior, es decir, la nariz, cornetes; o porque el velo del paladar, las amígdalas o las adenoides están muy grandes.
En todos esos casos, una alternativa es la cirugía que corrige las alteraciones de la vía área superior.
“Con las mejores técnicas quirúrgicas, el éxito de eliminación completa del ronquido va entre un 65 y 70%”.
El especialista añade que por cada 10 personas que se operan 3 vuelven a presentar el problema.
El costo de estas intervenciones varía según la complejidad; y oscila entre $1.200 y hasta $ 2.500.
En el caso de Mateo, los ronquidos suelen presentarse de forma esporádica, pero ahí con tan solo cambiar de posición deja de emitir esos ruidos molestosos.
Hay problemas neurológicos
Otro aspecto que genera ronquido es la apnea del sueño, es decir, los segundos que una persona (por relajación total de sus músculos superiores) deja de respirar varias veces mientras descansa.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la apnea del sueño afecta a cerca del 3% de la población en todo el mundo.
Este problema se genera por desórdenes neurológicos, ya que el cerebro regula y estimula el sueño.
“En ocasiones se relaja tanto que se olvida de respirar mientras se duerme”.
La sangre, en esos casos se oxigena muy poco y por eso quienes sufren este problema necesitan despertarse varias veces para respirar.
Esta dificultad va acompañados de dolores de cabeza, estado somnoliento, impaciencia e irritabilidad.
Incluso estos pacientespueden quedarse dormidos en el trabajo. Para combatir estas molestias se requiere de fármacos.
La médica familiar, Betthy Jácome, recalca que el principal inconveniente con la apnea del sueño es la mala calidad de vida del paciente.
Sugiere siempre la visita al especialista quien evalúa al paciente y determina, a través de múltiples estudios las razones del ronquido.
Fibroscopia, la técnica precisa
Uno de los exámenes más exactos para diagnosticar esta patología es la fibroscopia que consiste en una exploración de la nariz, mucosas, rinofaringe, nasofaringe, la hipofaringe y la laringe.
Este procedimiento se realiza generalmente sin anestesia, aunque se la administra en forma de spray en aquellos pacientes que pueden presentar naúseas.
Según el otorrino Ricardo Freire, otra técnica para detectar el origen de la patología es el estudio del sueño, donde se monitorea a la persona conectada a cables.
Ahí se emplea la poligrafía respiratoria que es un análisis minucioso para encontrar el sitio exacto del problema.
Para ello es necesario inducir al sueño, pero también se puede hacer el estudio mientras duerme en su casa.
Así se determina si el paciente ronca, si realiza pausas respiratorias y si existe o no una caída de la oxigenación. Con esos antecedentes, el otorrino planifica la estrategia terapéutica a seguir.
El especialista reconoce también que existen casos en los que los ronquidos se deben solo a una mala posición mientras se duerme y se los soluciona evitando dormir boca arriba.
Además, según la situación, se recomienda el uso de ciertas almohadas que ayudan a mejorar la respiración.
Lo que sí descartan todos los profesionales consultados es la efectividad de las bandas respiratorias
“Estas fueron creadas eminentemente con fines comerciales y lucrativos”.
De acuerdo a información de los médicos, la mayoría de hombres pasados los 50 años presenta este inconveniente.
Mientras que en las mujeres se da luego de la menopausia, con un predominio en de los primeros en un 80% sobre el 20%. “Los varones suelen despreocuparse mucho más de su alimentación”.
Por ello, Mateo espera que cuando sea adulto el problema que tuvo, pero no recuerda por su edad no se vuelva a repetir. (I)