La Paz, Bolivia.- El vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, condenó el "terrible entramado de complicidades, de silencios y castigos" que sufren las mujeres víctimas de violencia de género en este país, donde se han registrado 354 feminicidios en menos de tres años.

García Linera inauguró la Cumbre Nacional de Mujeres por una Vida Libre de Violencia, en la que participan bolivianas llegadas de todo el país para colaborar junto a las autoridades políticas y judiciales en la puesta en marcha de la nueva ley contra la violencia machista.

La normativa -cuyos reglamentos se analizan en esta reunión- fue promulgada hace un mes por el Ejecutivo para hacer frente al importante número de agresiones contra las mujeres que se da en el país e instaura el feminicidio como delito penal castigado con 30 años de cárcel sin indulto.

De esta forma, Bolivia trata de paliar la impunidad reinante hasta ahora en este tipo de crímenes, en un país en el que siete de cada diez mujeres han sufrido algún tipo de violencia.

El Vicepresidente afirmó que los avances que se han dado en las últimas décadas aún son "insuficientes" y llevará al menos tres generaciones más "desmontar esos mecanismos infames" que silencian y consienten la violencia contra la mujer.

García garantizó, además, el "pleno respaldo" estatal a las decisiones que tome esta cumbre de mujeres, a la que asistieron más de 300 representantes de instituciones y organizaciones sociales, aunque pidió a las asistentes que no olviden "la tarea, más difícil todavía, que está en casa de cada una".

Las mujeres participantes se reunirán en torno a mesas de trabajo para elaborar  la reglamentación que permita que la normativa se aplique con efectividad y tratarán todos sus aspectos, desde la financiación a la coordinación entre las instituciones.

Según datos del Programa ONU-Mujeres, Bolivia es el país latinoamericano con el nivel más alto de violencia física en contra de las mujeres y el segundo después de Haití en violencia sexual.

Desde 2009 hasta octubre de 2012 se registraron 354 feminicidios, según el Centro de Información y Desarrollo de la Mujer (Cidem).