Quito es la ciudad con más contagios de covid-19 en el país. En los primeros días del mes de septiembre supera los 21 mil casos confirmados. Desde mayo, la Secretaría de Salud aplica las pruebas que adquirió el Municipio en los sectores de la ciudad con mayor incidencia. Linda Guamán, asesora técnica de la administración, explicó que solo se realiza el procedimiento a las personas que presentan síntomas propios de la enfermedad, a quienes tuvieron un contacto cercano con pacientes confirmados y a los ciudadanos que se encuentran en primera línea: policías, choferes o médicos que pueden ser portadores asintomáticos.

Hasta el momento, la Secretaría de Salud del Municipio ha realizado 38.157 pruebas, de las cuales 27.092 salieron negativas y 11.065 positivas. “Tenemos una positividad del 30%, lo ideal es bajar por lo menos al 20%. Mientras más pruebas hagamos tendremos una mirada más objetiva de lo que sucede”, precisó la científica.

Pero la capacidad de procesamiento para detectar nuevos casos es insuficiente y para cumplir la meta de procesamiento de 1.500 pruebas por día, a los laboratorios de la Universidad Central, del Hospital IESS del Sur y la UTE, se sumó recientemente el laboratorio privado Onelabt, que está en la capacidad de trabajar con 1.250 muestras por jornada.

Según Alberto Narváez, docente investigador de la Universidad Central del Ecuador, la capital finalizó el 20 de agosto la segunda ola de contagios. “Deberían hacerse por lo menos dos mil pruebas diarias. La oferta debería ser masiva y gratuita para que la búsqueda de casos activos sea efectiva” indicó el galeno.

El Comité Científico Honorario de la ciudad analiza la posible situación de la ciudad después de que termine el estado de excepción. Los debates se centran en si será necesario adquirir más pruebas, cuántas y a quienes se las debería aplicar una vez que se modifiquen las medidas de restricción.

Narváez recomendó que se incrementen los puntos de triaje porque después del 13 de septiembre es posible que los casos se multipliquen. Bajo ese escenario, a su criterio, se debería establecer en octubre una cuarentena intermitente, tal como lo han hecho en ciudades de otros países. (I)