28 jóvenes que superan el cáncer se convierten en modelos
Estefany Soto sube a la pasarela con dificultad. Lleva un colorido vestido y sombrero con plumas que se usa para la danza tinku de Bolivia.
Ella camina por la pasarela sujetando un bastón. Las cámaras de las estaciones de televisión y de los diarios captan sus movimientos.
Hace dos años fue diagnosticada con osteosarcoma y perdió su pierna derecha. Ahora utiliza una prótesis.
Ella aprendió que la discapacidad no es incapacidad. “Los límites están en la mente”, sostiene.
Como ella, 28 jóvenes participan en la quinta edición del Bionic Fashion Day.
Este viernes 1 de febrero realizaron la presentación de trajes típicos, en el salón Regente de la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (Guayaquil).
El próximo lunes desfilarán en el Centro de Convenciones Simón Bolívar.
Minoshka Solís, de Costa Rica, también salió a la pasarela apoyada con un bastón. Su vestido con vuelos anchos resaltó su figura.
Hace siete años cambió su forma de ver la vida tras ser diagnosticada con cáncer óseo en su pierna izquierda.
Aunque tuvo que dejar la gimnasia, toma la enfermedad como una oportunidad para vivir más y no como sinónimo de muerte.
Hoy dicta talleres de superación y escribirá un libro. “Tengo un propósito: representar a los jóvenes que padecen cáncer para que sean visibilizados”.
Por su parte, Ana Poyatos llegó desde España. Ella apareció con un vestido blanco sin mangas, que dejó al descubierto la amputación de su brazo izquierdo.
Cuando tenía 11 años fue diagnosticada con osteosarcoma en esa extremidad.
A ella le costó asimilar la pérdida de su brazo, pero descubrió sus fortalezas. Hoy escala montañas y practica deportes extremos.
El desfile de Bryan Chasi con ayuda de muletas también provocó aplausos. Él modeló una camisa y pantalón blancos. El choneño perdió su fémur izquierdo y tuvo que someterse a cirugías debido a la metástasis. Así salvó su pulmón. “No importa las adversidades, sino el no dejarse vencer”. (I)