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Ecuador, 23 de Diciembre de 2024
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El Telégrafo
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No todos conocen los beneficios del plan “Bienvenidos a Casa”

Un encuentro entre migrantes efectuado en Ducur, provincia de Cañar, reveló que no todos los compatriotas que están en el extranjero conocen las condiciones  para acogerse al plan “Bienvenidos a Casa”, que impulsa desde hace algún tiempo la Secretaría Nacional del Migrante.

Muchos de los asistentes dijeron que hace falta más difusión del programa, tanto en el Ecuador como en el extranjero. A la cita acudieron compatriotas que volvieron y los familiares de aquellos que buscan regresar, pero beneficiándose de esta iniciativa. El plan que promueve la Senami comprende también asesorar en proyectos de emprendimiento.

Anselmo Calle, oriundo de la parroquia Gualleturo, en Cañar, emigró a Estados Unidos hace 12 años y regresó al país en el 2011. Lo hizo  con el sueño de estar junto a su familia y con el anhelo de invertir su dinero en un negocio propio. “Durante mi residencia en Estados Unidos logré reunir un capital grande para tener un sustento al momento de regresar a mi hogar y con la ayuda que el Gobierno se encuentra brindando  a la persona migrante se ha facilitado la situación”, dijo.    

Sin embargo, manifestó que no conocía el programa de la Secretaría. Empero gracias al asesoramiento brindado en este encuentro no dudó en contactar a su hija para que se acogiera inmediatamente a las facilidades que el Gobierno brinda actualmente a los migrantes.

Sacrificios en el exterior

Otro de los asistentes  fue Wilmer Ojes, quien volvió  hace un año y medio con el propósito de permanecer definitivamente aquí y con la firme idea de establecer una sociedad con sus hermanos migrantes. Señaló que el trabajo de los ecuatorianos en el extranjero es bastante duro. Sin embargo sostuvo que el pago es la mejor recompensa. “Lo que nuestra gente gana aquí en un mes, nosotros lo ganamos en una semana, pero asimismo el sacrificio es alto”, comentó.     

Wilmer sí tenía conocimiento de los proyectos que el Estado viene cumpliendo con los migrantes en el país, sin embargo nunca se involucró en ninguno.

Forman pequeñas empresas

Uno de los planes que han puesto en marcha los migrantes en  Cañar  es formar pequeñas asociaciones de seis y diez personas para constituir medianas y pequeñas empresas.

En el caso de Anselmo y Wilmer han decidido unir sus dineros y conocimientos con el resto de sus compañeros para formar una empresa embotelladora de agua.  

Hasta el momento, el grupo cuenta con un capital grande -aunque no revelaron la cantidad-  para arrancar en los próximos meses con su propia planta.

Ricardo Lazo se acogió al programa luego de arribar al país hace tres meses con la ilusión de reencontrarse con su progenitora, quien no lo había visto en 13 años. “Mi mayor felicidad es volver a mi patria y sobre todo ver a mi madrecita linda”, expresó  con una gran sonrisa, mientras asomaba  una estrella dorada de uno de sus dientes.

Actualmente, son varios los migrantes que de a poco se van insertando en los programas que ofrece el Gobierno, pero otros dicen no conocer a fondo los beneficios de los proyectos. “Nuestra intención es mejorar las situaciones que a diario enfrentamos nosotros y todos  los hermanos migrantes”, dijeron.

ASAMBLEÍSTAS SE REÚNEN CON LOS MIGRANTES

“Este encuentro nos permite que los hermanos migrantes que han retornado y los que aún se encuentran lejos se informen de los derechos que tienen para regresar al Ecuador”, expresó Ximena Peña, asambleísta por los migrantes en los  EE.UU. y Canadá.

Ella llegó hasta la parroquia de Ducur para hablar con los compatriotas. “El plan Bienvenidos a Casa es un programa que apoya a las personas  para proveer de nuevos productos, medidas y ayudas para el regreso voluntario, digno y sostenible”, señaló Paulina Padrón, asambleísta de la provincia de Cañar.

A través de la Secretaría Nacional del Migrante (Senami) y del Servicio Nacional de Aduanas de Ecuador (Senae) se facilita el traslado de menaje, herramientas de trabajo o vehículos. Estos últimos no pueden ser vendidos por los migrantes. La entidad aduanera es la única competente para determinar si la carga puede acogerse a exoneración.

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