El personaje
"La migración saca lágrimas a las familias y a sus defensores"
El hacer algo por los migrantes siempre estuvo en el pensamiento de Andrea Ledesma. Este oficio de ayudar a las familias de personas desaparecidas o fallecidas en un periplo hacía los Estados Unidos le ha dejado muchas historias tristes y muy pocas que le hayan sacado sonrisas.
Muy joven, a los 20 años, y aún siendo estudiante de Derecho, ya laboraba en la Gobernación del Azuay, entidad que en ese entonces entregaba los pasaportes y donde la gente interesada hacía largas colas, incluso dormía en los exteriores para obtener un documento para emigrar al país del norte; desde entonces fue aprendiendo lo que la migración iba “sembrando”, sobre todo, llanto y tristezas.
Ahora, a sus 42 años, no ha dejado de trabajar en este campo. Desde el cantón Gualaceo, donde instaló su oficina, 1800migrantes.com atiende a las personas que buscan encontrar a sus familiares que han desaparecido o quizá fallecieron en su ruta migratoria.
Según Ledesma, más de 110 compatriotas de Azuay y Cañar están desaparecidos, se perdieron en el trayecto hacia EE.UU. Estas estadísticas se reflejan solo desde el año 2005. Aún recuerda el momento en que tuvo que acompañar a los familiares cuando se hundieron barcos con compatriotas que viajaban en condiciones irregulares.
“Hay mucha tristeza cuando se ve a las personas que buscan desesperadamente a sus hijos a sus esposos, pero también a sus hijas”, señala la abogada. Ella brinda asesoría legal, muchas de las veces sin cobrar la consulta. (I)