Pequeños productores de la fruta, con fincas de hasta 10 hectáreas, recibirán mañana las mochilas fumigadoras que les permitirán rociar el herbicida para combatir la plaga de la sigatoka negra.

El anuncio lo hizo ayer en Guayaquil el ministro de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), Javier Ponce.
La concesión forma parte de la segunda etapa de la declaratoria de emergencia dispuesta por la cartera de Estado.

Ponce  indicó   que desde el lunes entregarán las 1.070 mochilas de fumigación a los pequeños productores que tienen hasta 10 hectáreas cultivadas. Esta es la segunda parte de la emergencia bananera.

Los kits con los insumos ya fueron repartidos de acuerdo  a los  cuatro ciclos de fumigación y dos de fertilización que de forma gratuita entrega el Ejecutivo.

Ponce manifestó que la emergencia bananera  terminará el próximo viernes y agregó que ayer ya se pagó a todos los productores, a quienes se les adeudaba  por la compra de los racimos.

Mientras tanto, en El Oro, unos 200 productores acudieron al auditorio del ex Predesur para capacitarse en el taller demostrativo sobre fichas ambientales, realizado por el Magap, el Gobierno Provincial Autónomo de El Oro (GPAO) y el Ministerio del Ambiente.

El taller fue dirigido a los agricultores que tienen hasta 20 hectáreas de plantación bananera.
Karina Córdoba, coordinadora zonal 7 de la cartera de Agricultura, manifestó que el objetivo del taller es enseñar la forma adecuada de llenar y aplicar fichas ambientales.

“Estas inscripciones son un requisito fundamental para regularizar ambientalmente las fincas. Lo que tratamos de hacer es que los productores bananeros contribuyan con el cuidado del medio ambiente”, manifestó.

Hugo Añazco, técnico de ambiente del GPAO, señaló que este tipo de talleres son muy importantes para el sector.
“Hemos hablado con los directivos del Ministerio, para que esto se traslade al campo y ser más efectivos en la enseñanza del cuidado ambiental”, precisó.

En las haciendas, indicó, se conocerán las malas prácticas de trabajo, protección y bioseguridad de los trabajadores.
Y es que los productores bananeros de 1 a 20 hectáreas deben sacar una ficha  para poder ofertar su fruta.

La ficha ambiental de suelo y agua a levantarse en cada bananera es un documento que el Gobierno implementó para que los campesinos y agricultores exhiban y protejan el ecosistema.

Fausto Farez, secretario de Gestión ambiental del GPAO, sostuvo que todos están comprometidos a proteger el ambiente.

Por ello expresó  que todos son responsables en las tareas para evitar la contaminación.
Manuel Guancay, uno de los campesinos asistentes al taller, señaló que estos programas motivan a reducir el índice de contaminación al ambiente.

“Las personas somos quienes más contaminamos  y eso  causa estragos en nuestra propia salud. Por ello considero que son importantes estas capacitaciones”, mencionó el productor bananero, quien tiene 13 hectáreas de plantación.

Con este taller se espera que los agricultores puedan desarrollar una agricultura sustentable.
El proceso de regulación ambiental deberá ser realizado en la Secretaría de Gestión Ambiental de la Prefectura, en calidad de autoridad de aplicación responsable acreditada por el Ministerio del Ambiente.

Según establece el Acuerdo Ministerial 092, emitido por la autoridad ambiental nacional, todas las fincas bananeras con superficie menor o igual a 20 hectáreas deberán regularizarse  a través de la obtención de una ficha ambiental.
La excepción es para las que intercepten con el Sistema Nacional de Áreas Protegidas, Bosques Protectores o Patrimonio Forestal del Estado.

En el caso de las fincas con superficies mayores a 20 hectáreas deberán regularizarse mediante la obtención de una licencia ambiental.

Los técnicos de los ministerios de Agricultura y  de Ambiente continuarán con este programa en el resto de cantones orenses.

Una vez que culminen esta tarea en las poblaciones bananeras de El Oro se trasladarán hacia las demás regiones.