Intermediarios afectan a la feria agroecológica
Con el objetivo de proveer a la ciudadanía de Ambato de productos libres de químicos dañinos para la salud, hace ocho años nació una organización de Productores Agroecológicos y Comercio Asociativo de Tungurahua (Pacat). Y un año después, este grupo creó una feria para expender estos productos directamente a los consumidores. Esta actividad tiene lugar en la plaza Pachano, al sur de la ciudad, todos los sábados de 6:00 a 13:00.
Los agricultores se turnan para expender sus productos en grupos de 100 a 115 cada sábado en el sitio, de tal forma que en cinco semanas el total de los agricultores tiene la oportunidad de participar en la feria. Cada productor paga por concepto de uso de la plaza 4,15 dólares mensuales, desde hace un año atrás al Municipio de Ambato.
En esa feria se expenden frutas, verduras, hortalizas, tubérculos, cereales, vegetales, hierbas aromáticas, productos lácteos y carne de ganado alimentado con hierba “limpia”.
Esta feria; sin embargo, presenta ahora un dilema debido a que los integrantes de Pacat ya no son todos productores. Dentro de ese grupo se ubican también comerciantes, quienes adquieren productos de otros mercados y los venden en esa feria, desvirtuando eventualmente el lema con el que trabaja la organización Agricultura Limpia.
Holger Smith, técnico de agricultura alemán y colaborador de la asociación, aseguró que “en el pasado había el caso de socios de Pacat que compraban en el mercado mayorista y vedían los productos en la feria agroecológica y esto ha creado mala fama. Y por esa razón se perdió credibilidad entre la ciudadanía que solía comprar en esta feria. Al parecer, estos casos continúan”.
Mariana Ochoa, compradora habitual en ese espacio, aseguró que “la feria quedó un tanto desvirtuada a raíz de que se empezaron a vender productos que no son limpios. En algunos puestos se comercializaban vegetales fumigados y con plaguicidas. Se podía claramente sentir el sabor de los químicos al momento de comer. Se debería controlar esto para que la gente que compra no se engañe al pensar que es un producto orgánico”, afirmó.
Por su parte, María Chango, productora desde hace más de 25 años, manifestó que algunos vendedores de ajo y cebolla compran estos productos en el Mercado Mayorista. “Todo lo que yo vendo lo produzco. Soy parte de la Pacat desde hace un año y no es justo que esta gente nos haga quedar mal. Si no son agricultores, no vendan aquí, no engañen a la gente y vayan a vender en otro mercado que no tenga este tipo de agricultura, como el Mercado Mayorista”, señaló la mujer, quien vende fruta, verdura y hortalizas.
De otro lado, Luis Aníbal Moreta, en calidad de presidente de Pacat, aseguró que ese problema ya no existe en la actualidad y que se combatió hace tres años. “A estas alturas, no podemos hablar de gente que no venda producto limpio. El 100% de los productos son limpios, lo que pasa es que cuando se produjo este problema, la mala fama quedó en el lugar y es difícil sacarle a la gente de la cabeza esa idea”, dijo.
Y añadió que se ha reducido a un 70% el uso de insumos en las plantaciones de los agricultores de la organización, habiendo recibido el “sello verde”. El restante 30% contiene insumos permitidos en esta clase de agricultura, tales como roca fosfórica, cal agrícola, sulfatos y nitratos. “Nosotros realizamos un control.
Una forma de controlar que los agricultores no utilicen productos no permitidos en la agricultura limpia, es hacer visitas improvisadas a las granjas, para saber qué insumos usan en los sembríos y conocer la calidad de las plantaciones”, manifestó Moreta.
De su lado, Vicente Pérez, director de Servicios Públicos del Municipio de Ambato, aseguró que “se hará en los próximos días una reunión con los socios de Pacat, para tratar el tema y buscar una solución de persistir el problema”.