A 30 minutos de vuelo desde el aeropuerto Río Amazonas, en la parroquia Shell está asentada la comunidad Jaime Roldós, que pertenece a la parroquia Curaray, en Pastaza. En el sitio se inauguró un nuevo sistema de agua potable, que beneficiará a  más de 450 personas.

En la ejecución del proyecto se invirtieron 233.000  dólares, de los cuales el Plan Binacional Capítulo Ecuador aportó   195.000 dólares no reembolsables, mientras que el Gobierno Municipal de Arajuno contribuyó con 38.000 dólares.

Gracias a ello, la población contará con un sistema de distribución de agua  tratada, que llegará directamente a sus domicilios. Para el tratamiento del líquido vital se utiliza energía renovable por medio de paneles solares. “Este proyecto ayudará a que las comunidades tengan agua pura y  eviten enfermedades”, dijo la  gobernadora Denise Coka.

Paola Inga,  directora del Plan Nacional, indicó que el objetivo de la entidad es dar atención a las nacionalidades para apuntalar las condiciones  del Buen Vivir (Sumak Kausay) . “La paz no es la ausencia de la guerra, sino la garantía de sus derechos”, expresó la funcionaria.

Por su parte, Divino Santi, presidente de la comunidad, reconoció que esta es la primera vez que los comuneros  satisfacen una necesidad básica (se refirió al agua) y agradeció por la oportunidad de mantener contacto directo con las autoridades, para conjuntamente gestionar el apoyo a las zonas del interior.