La conformación de nuevos barrios trae consigo la aprobación de normas internas que todos los socios están obligados a acatar. Dentro de las normas es común que las directivas resuelvan la aplicación de multas económicas que buscan la colaboración de los moradores en planes y proyectos que beneficien a la comunidad.

Sin embargo, la ejecución de esas “sanciones” genera problemas entre vecinos y, con ello, el retraso del barrio. Ese es el caso de Eco y Vida, una ciudadela de Llano Chico, en donde la legalización de tierras se ha visto afectada por el incumplimiento  en el pago de multas.

La Administración Zonal de Calderón tiene pendiente la regularización de 149 barrios, de los cuales 60 ya concluyeron el trámite y sus moradores recibirán escrituras individuales en noviembre próximo.

No obstante, dos familias no obtendrían el documento por no cumplir con la normativa interna del barrio. Clotilde Chicaiza y Salomé Sandoval compraron en 2002 los lotes 87 y 93 en 5.000 dólares cada uno, a lo cual se suman cerca de 2.000 más por obras de alcantarillado, agua potable y luz eléctrica.

Las mujeres denunciaron el caso ante la Administración Zonal de Calderón, pues consideran que se trata de una “injusticia”, porque desconocen los motivos de las multas y aseguran que cumplieron puntualmente el pago  de los predios.

Al respecto, el administrador Luis Reina explica que la regularización de barrios es un proceso en el que  participan  moradores, ingenieros, arquitectos y técnicos del programa “Regula tu barrio”, para que la comunidad esté conforme con la entrega de escrituras a los legítimos propietarios.

En el proceso, el programa “Regula tu barrio” debe conocer la normativa interna de los barrios, pero no intervenir o modificar las condiciones bajo las cuales se organizaron los socios.

José Chiza, encargado del programa en Calderón, explicó que si los moradores entregan los requisitos para acceder a las escrituras, el proceso demorará máximo 45 días, pero cuando hay conflictos internos se extienden indefinidamente. “Hay habitantes a los que siempre les falta un documento y mientras los tramitan, el proceso se retrasa”.

En el sector Eco y Vida, que ingresó al programa “Regula tu barrio” en 2011, los problemas internos han prolongado el trámite porque los moradores que no están de acuerdo con la administración del Comité Pro-Mejoras.

El barrio tiene 107 socios, de quienes 14 cuestionan la administración de los dirigentes. Una moradora que no se identificó -por temor a represalias- asegura que hay abusos de autoridad, porque se imponen multas y aportes para los trámites de escrituras, pagos con los cuales no están de acuerdo.

El malestar fue notificado al administrador zonal y al programa “Regula tu barrio”, pero sus representantes explican que los terrenos continúan a nombre del Comité Pro-Mejoras, porque las socias no pagaron varios servicios y una serie de multas.

Además, Chiza indica que las denunciantes firmaron un convenio en el que aceptaban la resolución y que la propiedad estaría a nombre del comité hasta que se cancelen todas las deudas. De ahí que, el funcionario reitera que el cobro de multas y cuotas está permitido si constan en los estatutos del barrio.

Lo mismo se aplica en otros barrios de Calderón, como Jesús del Gran Poder, Divino Niño y Bello Horizonte. Sus moradores aceptaron las mismas reglas y cuando concluyan los trámites de regularización, todas las familias deberán estar al día con sus pagos para recibir las escrituras.

Frente a esos casos, el programa “Regula tu barrio” determinó como requisitos básicos: formar un solo comité, inscribir sus estatutos en el Ministerio de Inclusión Económica, vivir más de 5 años en el barrio, tener escrituras a nombre de la organización, contar con espacios verdes y áreas infantiles, y gestionar la dotación de servicios básicos, lo que pagan entre los moradores.