El alcalde de Quito, Augusto Barrera, anunció ayer que la primera fase del mejoramiento de colectores, cuya construcción inició hace cuatro años, será concluida y entregada en diciembre.

La afirmación la hizo durante el recorrido que efectuó por las obras del sistema de tres colectores que edifica el Cabildo en la zona suroriente de la ciudad.

El Municipio invirtió alrededor de 4 millones de dólares en la construcción de las estructuras  denominadas Alpahuasi, Conchas Azules y el Noviciado, las mismas que tienen una extensión conjunta de 2,6 kilómetros y una altura de 20 metros promedio.

Con ello concluirá esta fase del mejoramiento del sistema de drenaje de la ciudad, que incluyó la edificación de grandes colectores como el de la calle Pomasqui (los Dos Puentes) o el denominado Anglo French, a la salida norte de los túneles.

Luis Burbano, subgerente de Alcantarillado de la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps), dijo que a inicios del próximo año arrancará el mantenimiento no intrusivo del sistema de drenaje superficial en el Centro Histórico. Y que para 2015 se prevé construir nuevos megacolectores, en el norte de la ciudad.

El Municipio ha realizado durante cuatro años de gestión 535 obras de agua potableEste proceso de renovación del sistema de evacuación de líquido de las calles comprende un sistema de separación de las aguas lluvias de las servidas.

En este esquema, los colectores antiguos serán utilizados para el flujo de las aguas negras y los nuevos para el drenaje del líquido proveniente de precipitaciones.

En el sector visitado ayer, los colectores superficiales son intervenidos al cabo de aproximadamente 60 años, pues su funcionamiento ya resultaba ineficiente con respecto a la cantidad de agua de lluvia que recibían así como en relación al crecimiento que registra la ciudad.

Los nuevos grandes drenajes llevarán el agua  lluvia hacia el río Machángara, donde se prevé la construcción de un interceptor que se encargaría de transportar el líquido a lo largo de 34 kilómetros, desde el Trébol hasta el sector de Bindobona, ubicado en la zona de San Antonio de Pichincha.

Actualmente, el caudal recibe agua directamente de las quebradas del sistema fluvial Cuscungo y Clemencia; según el Alcalde, en la mayoría de los casos estos cauces fueron canalizados o rellenados de manera antitécnica, lo que ha provocado que el indebido manejo de residuos sólidos provoque inestabilidad en el sistema de drenaje.

Otón Cevallos, gerente de la Epmaps, añadió que en Bindobona se construirá una planta de tratamiento de aguas residuales en la que se invertirán unos 300 millones de dólares. Se prevé suscribir los contratos para el diseño de la estructura la próxima semana.   

Alrededor de 100 mil habitantes de los barrios que se encuentran en los sectores Napo, Bobonaza, Alpahuasi, Pío XII, México, Chaguarquingo y Luluncoto son los beneficiados. El proyecto registra un avance del 69%.  

Germán Flores, presidente de la ciudadela Montúfar, ubicada en el sector de la av. Napo, comentó que antes de la intervención del Cabildo, eran frecuentes las inundaciones. Y aclaró  que eso complicaba la vida en  el barrio y en el manejo del tráfico en el  sector.

La construcción, reparación  de nuevos colectores, limpieza de sumideros y quebradas forma parte del Plan Lluvias. La Municipalidad invierte anualmente aproximadamente 16 millones de dólares con ese propósito. Muchos de esos trabajos no implican apertura de vías, sino que se realizan subterráneamente.

SE REANUDA EL TRÁNSITO POR LA AV. MALDONADO

La Empresa Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps) concluyó ayer, la reparación del pozo del colector ubicado en la intersección de la Av. Maldonado y Quijano (centro-sur).

La estructura de mampostería de ladrillo, según Luis Burbano, de la Epmaps, colapsó el sábado último a consecuencia de la vetustez, pues tendría entre 60 y 70 años como mínimo. La entidad reemplazó el viejo pozo por uno de hormigón.

Mientras tanto, la circulación permaneció restringida alrededor de la zona de la exterminal terrestre Cumandá. Galo Muñoz, del sistema Trolebús, confirmó que las unidades del sistema de transporte municipal únicamente llegaban hasta la parada de La Recoleta, desde el sur; y hasta la plaza de Santo Domingo, desde el norte. Mientras que los usuarios que buscaban avanzar hacia las estaciones de la Y y El Recreo, respectivamente, eran recogidos por unidades alimentadoras desde donde los dejaban los trolebuses y llevados hasta los citados puntos de trasbordo. En tanto, otras personas preferían caminar, especialmente cuando se dirigían al Centro.

Tras la reparación del colector, la Empresa Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop) habilitó el carril norte-sur de la vía para permitir el paso de los vehículos municipales de forma alternada. Mientras que los automotores livianos podrán avanzar hacia el norte hasta la calle Rocafuerte, para luego desviarse hacia el barrio La Loma.