En el Convento de San Agustín  las más de 15 obras del pintor colonial Miguel de Santiago están en proceso de restauración.

En la primera fase, las  obras atravesaron un proceso de  reforzamiento de estructuras, rentelados, consolidación de la pintura en áreas desprendidas y labores de limpieza en general. Luego de ese proceso, las  obras se encuentran en la fase para la restitución total de su cromática.

De las quince pinturas, cuatro ya están totalmente restauradas,  tres están listas para la reintegración de la pintura y el resto recibe procesos de eliminación de repintes y barnices.

Mientras tanto, los pintores ecuatorianos Manuel García y Juan Cuzco dan las últimas pinceladas sobre el gigantesco cuadro “El nacimiento del santo”, la obra de Santiago que permanece en el  interior del Convento de San Agustín, sometido a un profundo proceso de restauración,  que al igual que las demás obras está a cargo del Instituto Metropolitano de Patrimonio.

Rosa Torres, directora del taller de restauración de las obras del pintor quiteño, indicó la importancia de   rescatar estos cuadros,  que datan de la época colonial y que    son considerados patrimonios históricos de la ciudad. Los trabajos  se realizan con materiales reconocidos internacionalmente y que aseguran una durabilidad de mínimo un cuarto de siglo. “Eso sí, en condiciones adecuadas, con un microclima favorable y sin incidencia de rayos ultravioleta (UV)”, precisó.

Miguel de Santiago  nació en Quito  por el año 1620. Fue hijo de Lucas Vizuete y Juana Ruiz, pero lo adoptó el regidor Hernando de Santiago.