Una de las consecuencias de la época invernal es el deterioro vial, cuyos estragos ya se sienten en la capital. Varias calzadas que durante el año fueron intervenidas por la Empresa Metropolitana de Obras Públicas (Epmmop) ahora muestran baches y grietas que dificultan el tránsito vehicular y, en algunas ocasiones, han causado accidentes al tratar de esquivarlos.

Para solucionar el problema, se prepara un plan de bacheo emergente a partir de enero próximo cuando las lluvias son más intensas, informó Jaime Rivera, gerente de Obras Públicas del Municipio. Explicó que actualmente continúan  la rehabilitación de vías principales en distintas zonas de la ciudad.

Este año la Epmmop ha invertido 30 millones de dólares en obras de rehabilitación vial y accesos a barrios, y para el mantenimiento de las calles afectadas por el invierno tiene previsto invertir 250 mil dólares, como parte del plan de bacheo.

Rivera indicó que hay cuadrillas que recorren diariamente las vías, pero que durante el invierno no se abastecen y es necesario contratar más personal  para el bacheo. Generalmente las calles más afectadas son aquellas que tienen entre 20 y 30 años de construcción y no se les ha dado mantenimiento.

Para los conductores, el mal estado de las vías constituye un riesgo: “Hace unos días, por estar pendiente de los huecos en las calles, no me percaté de que un peatón había cruzado. Tuve suerte y logré frenar a tiempo”, relató  Luis García, chofer de transporte público.  

Los usuarios de la calle Pedro Pinto Guamán, ubicada en el sur de Quito, por donde diariamente circulan buses y automóviles que se desvían desde Conocoto o la avenida Napo para dirigirse al centro y norte de la capital, se quejan por el mal estado de la calzada. En tres cuadras se identificaron más de 20 baches, que meses anteriores  fueron cubiertos y que nuevamente aparecieron por las fuertes lluvias de las últimas semanas. 

“Por aquí circulan los buses que venimos desde Guajaló, El Recreo, La Magdalena... Es una calle muy transitada y no le ponen atención, solo ponen parches y al mes hay dos huecos más”, comentó un chofer de la cooperativa Translatinos.

Otra vía deteriorada es la Panamericana Sur, en el tramo que avanza desde la estación del Trolebús Jefferson Pérez y se une con la Pedro Pinto. Allí, solo en el carril en sentido sur-norte, se contaron 25 baches, entre grandes y pequeños.

Según el gerente de Obras Públicas, esas calles serán incluidas en el plan de bacheo, pero quienes priorizan las zonas para los trabajos de mantenimiento son las administraciones zonales. “Esas dependencias nos dicen qué calles son más importantes que otras, porque son las que están en contacto con la ciudadanía”.

De ahí  que, si alguna vía se encuentra en mal estado, los moradores deben solicitar el mantenimiento a la administración zonal correspondiente. El personal a cargo verificará y luego reportará a la Epmmop, entidad que ejecuta los trabajos. En las vías del sur de Quito hay más baches, porque las lluvias son más fuertes que en otros sectores.