¡En sus marcas, listos, fuera! Ese fue el grito que dio inicio a la final de la competencia de coches de madera que se realizó la mañana de hoy, 5 de diciembre, en el Centro Histórico de Quito.

La calle Mejía fue el escenario en el que 38 pilotos mostraron sus destrezas para conducir un coche hecho de madera. La salida fue en la calle Mejía y López, a la altura de los Túneles de El Tejar. Hasta ese lugar acudieron familiares, amigos y cientos de quiteños que querían presenciar la tradicional carrera Jorge Aguilar Veintimilla.

Durante el trayecto (cerca de tres kilómetros), los gritos y las barras fueron la tónica de la mañana. Además, personal de la Policía Metropolitana, agentes de Tránsito y de la Policía Nacional ayudaron a mantener el orden. Ellos estuvieron pendientes de que los asistentes no se cruzaran por la calzada y provocaran accidentes. Por la rapidez con la que los pilotos cruzaban la meta (Mejía y Venezuela), aún se desconocen los nombres de los ganadores.

Marco Aguilar, uno de los organizadores comentó que para designar a quienes trinfuraon en la 42 edición de la competencia se tenía que analizar los tiempos y si los participantes cumplieron con las reglas establecidas.

Las carreras de coches de madera se realizan en Quito desde 1973. Desde hace ya 42 años este evento se ha constituido una parte esencial de la tradición quiteña y sus fiestas. Hay tres categorías de competidores, los más pequeños tienen 6 años de edad hasta 8, les siguen los de 9 a 12 años y una tercera de 13 a 16 años.

La primera carrera inició a las 08:40 y terminó antes de las 10:00. Para el desarrollo de la competencia se realizaron cierres viales a lo largo de la calle Mejía y en tramos de las calles García Moreno, Cuenca y Venezuela.

Este año hay un premio especial para las niñas. Los tres primeros puestos reciben premios que constan de dinero en efectivo y un trofeo. Para el primero habrá $500 y un trofeo; para el segundo, $ 300, y para el tercero $200. (I)