Este espacio reemplazará a la actual parada la ‘y’ del trolebús
El arranque de operaciones en la estación El Labrador tiene retrasos
La estación El Labrador del Metro (norte) sigue sin operar, a pesar de que el alcalde de Quito, Mauricio Rodas, anunció que lo haría a mediados de junio.
El 5 de mayo, durante el recorrido de recepción de obras del sitio, Rodas señaló que luego de 4 a 6 semanas la ciudadanía empezaría a usar la infraestructura.
Desde el año pasado está previsto que las instalaciones remplacen a nivel de superficie a la actual Estación La Y del Trolebús, en un esquema multimodal: recibirá buses alimentadores, interparroquiales y trolebuses. Las labores de traslado de las operaciones de un punto a otro no se han concretado.
Para que el proceso se efectúe se requiere, por ejemplo, ampliar de la Y hacia el norte la red de catenarias (líneas de suministro de energía que alimentan a los trolebuses). Además, se debe definir las líneas que llegarán a ese lugar.
Mientras que en la nueva estación son necesarios equipos de cobro, venta de pasajes y señalización. De acuerdo con las previsiones de la Municipalidad, el lugar recibirá a unas 150 mil personas por día cuando empiece a operar y 100 mil más al momento que funcione el sistema de movilidad subterráneo.
Este es el segundo retraso que se produce en la operación del lugar por parte de la actual Alcaldía. En julio de 2014 Rodas anunció que la estación, junto con su similar de La Magdalena (al sur), estaría lista en diciembre de aquel año.
Dos meses después, a finales de octubre, el entonces gerente de la Empresa Metropolitana de Transporte de Pasajeros de Quito (EMTPQ), Rubén Lozano, confirmó lo dicho por el burgomaestre sobre la conclusión de la obra.
El exfuncionario también manifestó que en febrero estaría operativa la estación multimodal. Debido a un retraso de obras por parte del consorcio español Acciona, encargado de los trabajos, el segundo mes de este año se fijó como plazo definitivo de conclusión a abril, que no se concretó.
Nada se sabe del Metro
Entre tanto, poco se conoce sobre las negociaciones que mantiene la Alcaldía con el consorcio Acciona-Odebrecht desde el 7 de mayo.
El objetivo es reducir la brecha de financiamiento por alrededor de $ 490 millones, conocida tras la apertura de los sobres con las ofertas el 7 de julio del año anterior.
El sistema de contratación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en el que se basa el proceso, establece la posibilidad de negociar el precio.
Según Édgar Jácome, exgerente de la Empresa Metropolitana Metro de Quito, durante la administración de Augusto Barrera, “se puede determinar, por ejemplo, que en tal o cual lugar se instalen 2 escaleras eléctricas en lugar de 3; que se reduzca la profundidad de algunas estaciones, ahorrando material, o que alguna otra modificación, pero sin afectar la calidad”.
Los líos jurídicos del principal ejecutivo de Odebrecht en Brasil por acusaciones de corrupción, arrojan sombras sobre el tema.
Incluso los concejales Antonio Ricaurte (SUMA-VIVE) y Eduardo del Pozo (Creo), afines a Rodas, han manifestado que debe suspenderse el procedimiento. Por ahora el alcalde solo ha dicho que analiza el tema antes de decidir. (I)