Un total de 54 casas resultaron afectadas a causa de los remolinos de viento registrados la tarde de ayer en el sector La Morita, ubicada en la parroquia de Tumbaco (al norte de Quito), informó hoy el alcalde Mauricio Rodas.

Durante la presentación del Plan de Prevención y Respuesta ante Movimientos de Masa e Inundaciones por la Temporada de Lluvias, el burgomaestre detalló que se realizaron visitas casa por casa para evaluar los daños.

Juan Zapata, secretario de Seguridad del Municipio efectuó un recorrido esta mañana. Detalló que 19 personas acudieron ayer a la iglesia del sector La Tola Blanca, que fue adecuado como albergue. No obstante, el burgomaestre indicó que 7 personas continúan en los refugios. 

Rodas agregó que se activó un Fondo de Emergencia y se adecuaron albergues para evacuar a los afectados. Uno se ubica en la iglesia de la Tola Chica 3 y otro, en una Congregación de Hermanas de la Anunciación.

Ayer, los miembros de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) dotaron de cobijas, colchones y víveres para pasar la noche. Esta tarde, la secretaria de Gestión de Riesgos recorrió la zona. 

El Cuerpo de Bomberos atendió 3 casos: 2 por ataque de pánico y un niño con heridas leves. Hasta el momento, alrededor de 100 efectivos correspondientes a Policía Metropolitana, SNGR, Secretaría de Seguridad y el Comité de Operaciones de Emergencia (COE), se encuentran en el sector apoyando a los moradores.

Zapata aclaró que la evacuación de las personas fue voluntaria, por lo que otras familias decidieron quedarse en sus casas por temor a sufrir robos durante la noche.

Para evitar desmanes, integrantes de la Policía Metropolitana realizan permanentes controles.

Las casas están ubicadas en los barrios Chiviquí, la Tola Chica 3 y José Vinueza. Los remolinos de viento ocasionaron roturas en los ventanales, así como el levantamiento de los techos, que en su mayoría se componen de teja y lata. Algunos de sus habitantes iniciaron reparaciones colocando plásticos en las ventanas.

Isabel Troya, de 75 años, es una de las personas que recibió asistencia por parte del Cuerpo de Bomberos, que colocaron plásticos y palos en el tejado. Su vivienda es de un piso y está construida a base de bloque. Ahí hubo daños en las ventanas y se desprendió el techo. 

Isabel escuchó un ruido fuerte afuera de su casa. Trató de salir, pero la puerta no se abría. "Me asusté, no sabía qué hacer. Quería escapar, pero no podía", relató la  mujer, quien pasó la noche en el domicilio de su hija. 

El sector aún se encuentra sin servicio de luz. Personal de la Empresa Eléctrica todavía realiza reparaciones en las instalaciones eléctricas. Se estima que en las próximas horas se reinstalará el flujo de energía. En cambio, el suministro de agua potable se encuentra normal.

Lincoln Cevallos, técnico del Instituto Nacional de Meteorología de Hidrología (Inmhi), aseguró que los vientos ocurridos ayer alcanzaron velocidades de entre 60 y 70 kilómetros. 

El experto añadió que este tipo de eventos no son comunes en el Distrito, por lo que es poco probable que se repiten en los próximos días.