El presidente de la República, Rafael Correa, en el marco de su Informe a la Nación, indicó que el Gobierno Nacional ya tiene listo el nuevo Código Orgánico Monetario y Financiero con el que se eliminará “la normativa expedida en el apogeo del neoliberalismo” a finales de la década de los 90 en el país.

El Jefe de Estado aseguró que con este nuevo cuerpo legal -a partir de una nueva legislación integral y acorde a la Constitución de Montecristi de 2008- “superamos los errores históricos que causaron la crisis bancaria de fines de los años 90 en Ecuador”.

Previo a este anuncio, Correa recordó que en 1994 se aprobó la ley general de instituciones financieros que “consagraba  consagraba (...) el fundamentalismo neoliberal de la flexilibilización financiera, el capitalismo especulativo, la economía de casino, la libertad pero para el capital. Inmediatamente empezó a funcionar su libertad, la especulación cambiara, la llegada de capitales golondrina, depósitos offshore y créditos vinculados. En este mismo recinto se preparó el salvataje bancario con los votos de la partidocracia”.

Luego rememoró que, en 1998, con la creación de la Agencia de Garantías de Depósitos (AGD) se “incurrió en una prodigiosa e irresponsable generosidad con recursos del pueblo ecuatoriano para alimentar el voraz capital especulativo”. Pero ese mismo año, según Correa, -y con la propuesta presentada por el aquel entonces congresista Jaime Nebot Saadi- se estableció el impuesto a la circulación de capitales que “consagraba el hecho de que quienes paguen por el descalabro que se avecinaba (la crisis bancaria) no fueran sus verdaderos culpables, sino toda la ciudadanía”.

Según el Primer Mandatario, el nuevo Código  permitirá eliminar esta herencia de la época “neoliberal”, aunque advirtió que “ya nos hablaran los de siempre, del Estado  controlador y nos acusarán de que le estamos quitando su libertad. Sí la libertad de pocos a cambio de la pobreza de muchos, es la libertad de nuestras oligarquías, de aquellos que añoran, a los que quieren regresar, a los que intentan la restauración de sus abusos, de la explotación, la restauración conservadora".

Sobre este mismo cuerpo legal, el ministro Coordinador de la Política Económica, Patricio Rivera, dejó entrever -durante su intervención en el informe a la nación- que con este nuevo código se impedirá que la banca envíe dinero a paraísos fiscales y dijo que el proyecto busca que “los bancos trabajen para la sociedad” y no a la inversa.

“Ya nos hablarán de que impedir la movilidad del dinero a los paraísos fiscales es cortar sus libertades”, dijo Rivera, anticipándose a las críticas que podría recibir el proyecto de código que el presidente Rafael Correa había dicho “está listo” minutos antes.

Actualmente, los bancos pueden enviar recursos a paraísos fiscales pagando el Impuesto a la Salida de Divisas que es de 5%.

El ministro  confirmó que el Gobierno enviará el proyecto de código a la Asamblea Nacional en una fecha que no precisó. Ese proyecto “garantizará un cambio en la sociedad para que los bancos trabajen para la sociedad  y no la sociedad para los bancos”, señaló sin dar más detalles.

“Nunca más permitiremos un gobierno sometido a los mandatos de la banca y de un grupo de familias pudientes. Nunca más permitiremos entes de control como los que había en los noventa que eran poco menos que unas sucursales bancarias. Nunca más un país resignado donde la mal llamada libertad de unos pocos sea la pobreza de las grandes mayorías”, añadió.

Al referirse a los logros del Gobierno, resaltó el crecimiento del país el año pasado que fue de 4,5%, cifra que superó la estimación inicial de 4%.

“Crecemos, pero crecemos mejor porque reducimos pobreza. Durante este Gobierno, 1 de cada 3 ecuatorianos que era pobre dejó de serlo. Más de un millón de personas salieron de la pobreza”, dijo durante su discurso.

También resaltó recientes conquistas y mencionó que este año, por primera vez, el ingreso familiar promedio cubrió la canasta básica. Además se aprobó la ley que permitirá cerrar la crisis bancaria de finales de los noventa luego de 15 años.

De otro lado, destacó el hecho de que durante este Gobierno se realizara la “mayor inversión pública” en la historia del Ecuador. Entre 2007 y 2013, ese rubro representó el 11,27% en promedio. A ello se suma un crecimiento importante en el volumen de crédito de la banca pública destinado, principalmente a actividades productivas, pasando de $ 2.830 millones entre 2000-2006 a casi $ 21.000 millones entre 2007 y 2013.

"El Yasuní seguirá viviendo"

Correa dedicó varios pasajes de su primera parte de intervención a defender la explotación responsable de los recursos naturales del país. Es así que reiteró que se afectará el 1 por mil del Yasuní-ITT con el objetivo de conseguir recursos económicos que permitan eliminar la pobreza en Ecuador.

"El Yasuní seguirá viviendo, jamás permitiría que desapareciera, pero la pobreza disminuirá y con suerte después de decisiones, sobre todo en las urnas, la venceremos definitivamente", sentenció el Primer Mandatario.

Sin embargo, el gobernante lamentó que sectores autodenominados como ecologistas manejen una "doble moral". Correa puso como ejemplo que "he visto cómo los que se proclaman defensores de la Pachamama, y con mucha soberbia creen que son los únicos que la saben proteger, sostienen absurdos tales como rechazar la gran minería y demagógicamente aceptan la pequeña minería, mucho más contaminante, la misma ganadería que en nuestra Amazonía produce mayor devastación que cualquier minero".

El Primer Mandatario recordó que en las últimas elecciones presidenciales se dio un gran respaldo a la propuesta de explotación responsable. "En las parroquía García Moreno, del cantón Cotacachi, donde se encuentra la zona minera de Intag vencimos 9 a 1 a las posiciones antimineras. En la parroquia San Gerardo, del cantón Girón (Azuay) donde se encuentra la zona minera de Quimsacocha, vencimos 4 a 1. A nivel nacional 20 a 1 vencimos la posición antiminera. Para ellos no importa la democracia, sino su capricho".