Misión militar se despidió de Haití con entrega de obras
Los 55 militares ecuatorianos que integran la cuarta Misión de Apoyo a la Reconstrucción de Haití (Marhec IV) concluyeron ayer su trabajo en el país caribeño y entregaron las obras de infraestructura ejecutadas durante nueve meses.
Una nueva perspectiva de vida y decenas de obras dejan los ecuatorianos a la comunidad de Lambert en el valle de LArtibonite, todo esto porque se construyeron dos puentes 80 kilómetros de vías asfaltadas, un jardín de infantes, dos escuelas y tres centros de salud. Pero la colaboración internacional sobre todo permitió que Ecuador formara a los primeros oficiales y soldados haitianos luego de 18 años de que desapareciera la milicia en el país.
Ese equipo de 40 personas, 10 oficiales y 30 soldados, administrará el campamento construido por los ecuatorianos y que ya fue entregado por el contingente militar.
La ayuda de Ecuador empezó tras el terremoto que afectó principalmente a Puerto Príncipe (la capital), el 12 de enero de 2010. A esa ciudad llega toda la ayuda internacional y por ello, luego de casi cuatro años, aún existen campamentos con decenas de carpas instaladas en las calles en donde viven las familias que migraron de otras ciudades como Artibonite.
El mayor Marco Navas, comandante ecuatoriano encargado de la misión, explicó que en Puerto Príncipe ya existía la ayuda necesaria y se decidió que Ecuador actuaría en otro frente.
“Lambert era como el granero de Haití, pero luego del terremoto las familias migraron hacia la capital porque allá encontraban comida gratis y atención médica. El trabajo de Ecuador consistió en lograr que esas familias retornasen y que la producción agrícola resurgiera”, explicó. Este plan se cumplió porque según cifras oficiales se conoce que el porcentaje de producción, principalmente de arroz, subió en 2 y 4%. “Estas cifras nos demuestran que se cumplió el objetivo”, dijo Navas.
“Ecuatorianos son hermanos”
Para los habitantes de Lambert el trabajo de Ecuador significó un cambio radical, pues antes no tenían caminos para sacar los productos cosechados. “Hemos trabajado en seis ejes: vialidad, agricultura, salubridad, educación, salud y desarrollo comunitario. Ahora hay carreteras para transportar lo que siembran, puentes, accesos dignos a las viviendas y limpieza de canales para evitar inundaciones”, comentó el oficial ecuatoriano.
Por estas razones los pobladores llaman a los ecuatorianos “bon bagay”, que en su idioma, una mezcla de francés y una lengua nativa, significa buena gente o algo bueno, dependiendo de cómo se lo utilice.
Así lo manifestó el teniente Tesnor Wolsby Ted, militar haitiano formado en Ecuador que estará encargado del campamento. “Para nosotros los ecuatorianos son hermanos, cosa buena que siempre ayuda; nos han enseñado a trabajar y hacer las cosas bien. Siempre estaremos agradecidos con ellos”, dijo.
Pero el ingreso de las Fuerzas Armadas de Ecuador, en principio, fue complicado. Navas comentó que hubo un período de socialización con la comunidad porque había resistencia a la presencia de los militares. “Nos hemos ganado su confianza y ahora el grupo que se queda a cargo, aunque está formado por jóvenes, tiene que trabajar igual o mejor que nosotros para mantener el respeto de la comunidad”, manifestó Navas.
Datos
El grupo ecuatoriano, que fue parte de la última de cuatro misiones que se enviaron al país caribeño, está conformado por cinco oficiales, 46 soldados y cuatro trabajadores públicos.
El contingente llegó a Haití el 10 de marzo de este año para ejecutar los trabajos de reconstrucción vial por el terremoto sucedido en 2010.
Según el Ministerio de Defensa la ayuda a Haití tiene un monto superior a los 30 millones de dólares y con ello se trabajó en infraestructura educativa y la salud.