Oswaldo Jarrín, flamante ministro de Defensa Nacional, reiteró que los militares son los encargados de preservar la soberanía nacional ante las acciones de cualquier grupo transnacional irregular que pretenda infiltrarse en el país.

En su primera rueda de prensa, Jarrín manifestó que el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y la Subsecretaría de Defensa Nacional se encargarán de la "planificación en función de la política de seguridad de la frontera norte, que será emitida por el Presidente de la República".

El funcionario dijo que solicitará una reunión del Consejo de Seguridad Pública y del Estado para realizar, en primer lugar, un diagnóstico para reformular la política de seguridad de la frontera norte. De allí se desprenderá la nueva directiva de Defensa Nacional y la planificación, para que sea actualizada la política en esa zona del país. Por ejemplo, se verificará las condiciones laborales de la milicia en la frontera.

Jarrín fue enfático al señalar que en esta nueva etapa se requerirá del apoyo interinstitucional para promover, sobre todo, los proyectos y programas que se ejecutan desde la Presidencia de la República, como es la elaboración del Plan de Desarrollo de la Frontera Norte.  Aunque no detalló de quiénes, el ministro indicó que también contarán con apoyo externo.

Además manifestó que no se puede presionar a Colombia para que refuerce su presencia en su frontera. "No podemos presionar internacionalmente, pero pueden existir acuerdos y declaraciones conjuntas".

Aclaró que tras analizar con el Mandatario, el Ministerio se convierte en un coordinador del sector de defensa. Hasta hace poco, el exministro del Interior César Navas manejó la vocería de la crisis en frontera. (I)