Hoy se cumplen 42 años del golpe militar liderado por Augusto Pinochet, que marcó un quiebre de la democracia chilena, además del fin del gobierno de Unidad Popular, liderado por el socialista Salvador Allende. Esta vez, no es un aniversario más. Esta fecha se da en Chile en medio de una reapertura de varios de los casos más emblemáticos de violaciones a los derechos humanos y tras la creación de un organismo dependiente del Ministerio de Defensa para facilitar la entrega de información por parte de las Fuerzas Armadas.

En Chile, los 11/S suelen conmemorarse con ‘romerías’ al Cementerio General de Santiago, pero también con violentas protestas, especialmente en la periferia de la capital. Por eso es que la Intendencia Metropolitana anunció ayer una serie de medidas para evitar disturbios, como el adelanto de la hora pico en el transporte público y el despliegue de la policía (carabineros) en lugares donde se piensa podría haber manifestaciones.   
“El 11 de septiembre es una fecha histórica y triste para nuestro país, que tiene que ser de reflexión y conmemoración, pero no como algunos pretenden: como una oportunidad para cometer delitos y causar desmanes en nuestra ciudad”, afirmó el intendente de Santiago, Claudio Orrego.

Al mismo tiempo, Chilectra, la empresa de energía local, anunció un aumento de sus recursos para atender los problemas derivados de los cortes de electricidad que suelen generarse este día.

Este nuevo aniversario del golpe coincide además con la proyección de una serie de filmes y documentales políticos, en torno a la figura de Allende, tal es el caso de ‘Allende, mi abuelo Allende’, realizado por la nieta del exjefe de Estado, Marcia Tambutti.

Su abuelo era una suerte de fantasma, un misterio en el más íntimo entorno familiar; una figura algo incómoda en el plano más personal. Por eso Tambutti se propuso realizar un documental en donde actúa como una suerte de sicoanalista de su propia familia, para hablar del Allende íntimo, del padre, del esposo, del amante, del soñador; no del presidente icono de la izquierda chilena y latinoamericana.

En Chile se acaba de estrenar el filme, que en mayo pasado ganó el premio L’Oeil d’or como el mejor documental en la 68ª versión del Festival de Cannes. El trabajo de la nieta de Allende no es un documental político, sino todo lo contrario: apela a la emoción, al relato de todos sus familiares más cercanos y por supuesto de Hortensia Bussi, su esposa, y de Isabel, su hija senadora.

El hilo del documental es la tragedia, el exilio y el golpe que significó para la familia Allende la pérdida del expresidente socialista. Por primera vez, una cinta sobre Allende indaga en su álbum familiar, en escenas de la vida cotidiana que muestran a un político en lo más íntimo de su vida personal, con luces y claroscuros. “Esta película es una invitación a una reflexión familiar, a enfrentar los temas aunque sean dolorosos”, aseguró Tambutti, quien incluso se refiere a la vida extramarital de su abuelo.

Además de ‘Allende, mi abuelo Allende’, por estos días en Chile se exhibe otro documental que ha recibido elogios. Se trata de ‘Quilapayún, más allá de la canción’, de Jorge Leiva y que aborda la historia de uno de los conjuntos musicales más emblemáticos de la época de la Unidad Popular y que debió exiliarse en Francia tras el golpe de Augusto Pinochet.

También un montaje teatral revive el 11 de septiembre de 1973 en la Universidad Técnica del Estado. La compañía de teatro La Situación presenta una obra que lleva por título ‘E.A.O Ocupación’, que narra los hechos históricos ocurridos después del golpe en este campus universitario.

Aparte de los documentales y esta obra de teatro, por estos días también se ofrecerán funciones gratuitas de la película de Miguel Littín, ‘Allende en su laberinto’, que escenifica las últimas horas del expresidente en La Moneda, durante la mañana del 11 de septiembre de 1973. El filme es protagonizado por el actor chileno Daniel Muñoz y se filmó en Santiago y Caracas.

Y para el mismo 11 de septiembre, la emblemática agrupación musical chilena Santiago del Nuevo Extremo dará un concierto en la comuna de Providencia. Luis Le-Bert, líder del grupo, señaló que tocar en un día tan emblemático para la historia del país es “reconocernos en las voces de los que amamos. Eso es cantar un 11 de septiembre. Cantar en Providencia un 11 de septiembre no hará sino retumbar más mi voz en el cielo y la cordillera”.

En el plano de las series televisivas, a fines de agosto se estrenó ‘Guerrilleros’, que recrea la historia del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (Fpml), grupo armado que se rebeló contra Pinochet y que protagonizó un fallido ataque en su contra en septiembre de 1986. (I)

DATOS

El Gobierno de Allende era de izquierda y destacó por el intento de establecer un Estado socialista usando medios legales del poder Ejecutivo, como la nacionalización del cobre, la estatización de las áreas de la economía y la aceleración de la reforma agraria, en medio de la polarización política internacional de la Guerra Fría y de una grave crisis económica y financiera interna.

El Gobierno terminó abruptamente mediante un golpe de Estado el 11 de septiembre de 1973, en el que participaron las tres ramas de las Fuerzas Armadas y el cuerpo de carabineros, tres años antes del fin de su mandato constitucional. Ese mismo día, luego de que el Palacio de La Moneda fuese atacado por aviones y tanques, Allende se suicidó.

Chilenos se asentaron en Ecuador en donde formaron comunidades que dejaron de funcionar con los años.

-----------------------------------------------------------------------------------

Testimonio de Domingo Brassea  

“El problema que vivimos se parece al de Venezuela”

En 1973 ser funcionario del Gobierno de Allende era una sentencia, por eso fui preso al poco tiempo de caer el Gobierno.

El problema que vivimos es bastante parecido a lo que se vive en Venezuela, es casi el mismo modelo. La gente se cansó de la escasez porque faltaba todo, lo escondían. Sin embargo, había contrabando en la frontera y los productos se iban a todos los países, eso causó gran insatisfacción en la población, la gente sentía la escasez.

Eso es lo que ahora se llama golpe blando porque van ablandando las instituciones para que el pueblo se vaya en contra del Gobierno.

Luego de esto vino el golpe militar con todo su horror. Como me identificaban porque me encargaba de abrir los supermercados que escondían los productos para que los ciudadanos los adquirieran, era inminente la prisión.

Recuerdo que caí preso el 23 de octubre de 1973. El Gobierno les había dado a los militares unos terrenos rurales para que  puedan hacer todas las prácticas que necesitaban y ahí fue a donde me llevaron  y me torturaron. Éramos miles de personas. Entre los detenidos había jóvenes de 14, 15 y 16 años, ellos ya estaban casi para morir. Pero de suerte me salvé con 8 personas.

Nos torturaron, no nos daban comida y cuando llegaban unos pollos podridos nos obligaban a comer. Llegué a la frontera con Perú y ahí pude salir. Si caía preso por segunda vez era segura la muerte. Llegué a Ecuador y me quedé aquí viviendo. (I)

--------------------------------------------------------------------------------------

Testimonio de Jorge Poblette    

“Caer preso era casi la sentencia de muerte”

Como tenía partidarios de Allende era casi segura la prisión. Vivíamos una democracia que tenía muchos años hasta que vino el golpe militar de Pinochet  y fue ahí que caí preso con mi hermano. Recuerdo que fue en un cumpleaños familiar cuando llegaron los carabineros; marinos y  militares rodearon la casa y apuntando a mi familia preguntaron por mí y mi hermano, salimos sin resistir. Nos entregamos en medio del llanto de mis hermanas y sobrinos. Es que caer preso en esa época era casi una sentencia de muerte, mucho más si eran reincidentes.

Yo era soltero, tenía como 28 años cuando tuve que salir de Chile por la persecución. Quedé libre pero tenía que regresar a firmar diariamente. La situación era muy difícil y por eso determinamos que era mejor salir de Chile porque nos seguían buscando.

Los métodos que ocupó la dictadura para seguir a sus opositores fueron brutales. Tenemos una historia de más de 3 mil muertos y desaparecidos, por eso quedarse en Santiago era complicado y tuvimos que buscar el exilio.

Yo tenía mis padres y familia que tuve que dejarlos, es un proceso bastante difícil. Llegué como refugiado de la Acnur a Perú hasta que se terminó el pedido de asilo.

Mis hermanos se fueron a Australia y a Francia y yo decidí ir a Ecuador y no me arrepiento de esa decisión. Estados Unidos también me ofreció acogida pero yo soy un hombre de izquierda y no lo acepté. (I)