Este viernes 26 de octubre se cumplen 20 años de paz entre Perú y Ecuador. En este tiempo, según el Gobierno, hay beneficios como el proceso de desminado humanitario y el desarrollo en la frontera.

El embajador Alejandro Suárez, integrante del equipo Negociador del Tratado de Paz entre Perú y Ecuador, destacó que la paz fue el acontecimiento más importante de las relaciones internacionales de Ecuador en todo el siglo 20.

“El desempeño de las fuerzas armadas en la guerra del Cenepa fue brillante. Eso le devolvió  al país la autoestima. Fuimos a la mesa negociadora no como un país vencido, sino como digno y orgulloso”, dijo, al resaltar que el país no perdió en la guerra.

A 20 años de la firma, reconoció que se alcanzaron muchos de los objetivos que se plantearon en 1998. Pero falta, dijo, uno de los cinco ejes viales de integración en zona fronteriza. Ese es el que debería recorrer paralelo al río Santiago, que daría más comunicación a los puestos de navegación que tiene derecho Ecuador en el río Marañón-Amazonas, que aún no construyó.

Suárez destacó que a pesar del desarrollo en la frontera todavía existen problemas como el contrabando, principalmente. Pero eso no es una mancha actualmente. “La relación entre ambos países es óptima, como lo vinieron haciendo desde que  suscribieron la paz”.

En estos años ambos gobiernos han priorizado el desminado. Según datos de la Cancillería del Ecuador, el proceso se profundizó especialmente en el kilómetro 2, en Tiwintza. Entre 2000 y 2017 se liberaron 510.286 m² de áreas peligrosas y se destruyeron 11.881 minas antipersonales y 74 minas antitanque. Falta por desminar 100.496 m². Para este año se prevén recuperar 61.649 m2 y destruir otras 1.158 minas antipersonales.

Por su parte, el Ejército de Perú tiene para ese proceso un Plan Nacional de Desminado 2017 - 2024. Ellos estiman que falta destruir más de 6.000 minas en cuatro zonas de la Cordillera del Cóndor (lado peruano): Cenepa, Santiago, Achuime y Tiwintza.

Días atrás el ministro de Defensa de ese país, José Huerta Torres, recibió una donación de herramientas y equipos por parte de la Embajada de Alemania, lo que permitirá reforzar las actividades de desminado en la cordillera del Cóndor.

El Ejército, según el Ministerio de Defensa de Perú, recibió tres carpas tipo domo para albergar a las escuadras de desminadores, siete purificadores de agua, equipos médicos para el control de trauma shock, cuatro desfibriladores portátiles, tres generadores de energía solar y nueve equipos de GPS.  

En estos años los impasses entre los países fueron menores. El último fue la construcción del Parque Lineal Huaquillas, que incluía un muro que despertó malestar del lado peruano.

“El problema del muro en Huaquillas fue un incidente de muy bajo nivel, además hubo un mal entendido entre los países, pero ya fue superado”, aclaró el embajador Suárez. (I)