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El Telégrafo
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Lorena Naranjo, directora Nacional del Registro de Datos Públicos

“Los datos personales son el nuevo petróleo para las empresas”

“Los datos personales son el nuevo petróleo para las empresas”
Foto: Carina Acosta / EL TELÉGRAFO
21 de julio de 2019 - 00:00 - Carla Maldonado

Está a cargo de una tarea delicada: el cuidado de los datos públicos de los ecuatorianos. Se llama Lorena Naranjo y es la Directora Nacional del Registro de Datos Públicos. Ella conversó con este Diario sobre cómo proteger la privacidad de los ciudadanos y del proyecto de ley para regular este tema.

¿Qué implican los derechos digitales, que surgieron por el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC). También aparecen para defender a las personas en entornos de uso masivo de información que puede causarles un perjuicio?

Es una nueva categoría de derechos que vienen desde Europa. Conceptualizan a la persona que no solo tiene riesgos reales, sino también virtuales. Tienen derechos que están en la Constitución, en el artículo 66: derecho a la protección de datos personales. Hay otros que se forman como el derecho a la educación digital de niños y adolescentes.

¿Cuáles son los principales temas que tiene la promoción del  anteproyecto de Ley de Protección de los Datos Personales?

Proteger al individuo, se empodera al ciudadano de la titularidad de los datos, le otorga acceso de cancelación y rectificación y oposición. Le permite a la persona exigir la corrección de esos datos al proveedor. Si eso no ocurre, una entidad velará para que los requerimientos de los ciudadanos se efectivicen.

Un ejemplo, solicito que no me llamen por teléfono y ejerzo mi derecho de oposición. Necesito intervención estatal para que verifiquen que no se ceden los datos personales de los clientes de una empresa a otra, sin previa autorización. Esto no se puede encargar al ciudadano porque no tiene tiempo ni recursos para exigir a los responsables del tratamiento de datos.

¿Cómo se desarrolla la campaña contra violencia digital “Mis datos soy yo”?

En las aristas está la cultura de la autoprotección; se les enseña a niños y adolescentes, que son nativos digitales, pero no tienen desarrollado el criterio de riesgo. Es importante que los padres, los maestros y el entorno social contribuyamos a que no se expongan y que no tengan comunicación con extraños. Tenemos a chicos de menos de 14 años utilizando redes sociales, cuando no saben los riesgos a los que se exponen con personas de identidades falsas. Hay estadísticas de denuncias en la Fiscalía y se nota un crecimiento del delito desde 2016. Esto es una problemática a nivel nacional. Hay casos de personas que utilizan el anonimato para un acercamiento físico, y videos sexuales que son pornografía infantil que se difunden en sitios web.

¿Los padres qué deben hacer?

Primero deben concientizarse de que no pueden exponer a los niños y adolescentes a esos peligros. No tomar fotos con uniformes del colegio, ni  de la casa ni de los vehículos. Tampoco deben postear fotos del mismo día en que se van de viaje porque avisan a un entorno. No deben poner en riesgo innecesario a sus familias y no publicar nada en redes del país porque es un gran espacio y no conocemos quiénes están allí.

¿Qué es el habeas data?

Es una garantía constitucional que permite el ejercicio de derecho a la protección de datos personales, pero cuando estos ya han sido vulnerados. Ejemplo: datos incorrectos que le causan daño e impiden acceder a un crédito, a educación y a un trabajo. Otro ejemplo: en una base de datos, una persona tiene licencia B pero hizo cursos para tener la licencia C. Sin embargo, por ese dato incorrecto, el ciudadano pierde la posibilidad de tener un trabajo. El habeas data es pedir al responsable del tratamiento de datos, la modificación o la corrección de esas información porque transgrede derechos. El problema es que en este país no hay mucho conocimiento sobre cómo están formadas esas bases de datos.

¿Entonces, no funciona el habeas data?

No hay, lo que existe es una visión limitada de cómo aplicar esto. También hay un problema técnico o del abogado de la persona que gasta recursos económicos y no se entera de la vulneración de sus derechos. Un caso típico: una proveedora, que consta como deudora y es parte de una organización de base de datos. Allí los clientes sufren la categoría de morosos. Si arreglo el habeas data es solo para una persona, pero ¿qué pasará con las otras 15.000 personas que están en la misma base de datos? La idea es tener una ley que beneficie a todos.

¿Cuáles son las otras formas de transgresión de los derechos digitales?

Del bloque de derechos humanos, de 1948, casi todos tienen manifestación digital. Y se han potenciado, ya no solo tienen repercusión real, sino digital. Por ejemplo, la difusión de una noticia real: una mujer casada tenía una relación extramatrimonial, que se difundía en su entorno. Pero como no había TIC se enteraba solo el barrio, el pueblo y ella huía. Actualmente es diferente, se entera todo el mundo en fracciones de segundos. Por ejemplo, eso pasó el año anterior con el caso “Lady Tantra”. Cuando los derechos físicos se materializan en entornos digitales hay una masificación del daño porque un número mayor de personas conocen el tema. Además, se anula a la víctima y el daño es masivo porque transgrede algunos derechos y afecta a muchas personas a quienes se las estigmatiza.

La semana pasada publicaron en las redes las fotos íntimas de una mujer. ¿Qué deben hacer los ciudadanos cuando ocurre algo así?

Existen tipos penales para esos casos, como la violación a la intimidad, que está en el artículo 178 del Código Integral Penal (COIP). Pero sirven solo a una parte de los derechos. Hay otros que nacieron con las TIC y acarrean nuevos problemas sociales que el derecho debe solucionar. Son los que tratan los datos personales porque tienen errores, algoritmos con preconcepciones y que arrojen valoraciones incorrectas. Por ejemplo:  la utilización de videocámaras laborales, la protección de niños, la desconexión digital, entre otros.

La Ley de Protección de Datos en Europa impone multas millonarias para quienes entregan los datos personales a terceros. ¿Se contempla eso en Ecuador?

Están contempladas multas y el sistema sancionatorio. Queremos evitar que usen datos personales, es nuevo petróleo y hay quienes lucran de esa información. La multa es necesaria, pero no se puede anular el ejercicio económico. El cambio cultural es lo más difícil. (I)   

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