Los afectados por la Ley de Plusvalía, que se tramita en la Asamblea Nacional, son los especuladores que durante años se beneficiaron de la información acerca de ciertos predios, para luego hacer actividades comerciales lucrativas, aseguró el presidente de la República, Rafael Correa.

Consideró que uno de los defensores de esos especuladores es el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot Saadi, quien durante gran parte de su vida se ha dedicado al negocio inmobiliario, por lo que se opone a la propuesta del Ejecutivo.

En el enlace ciudadano, emitido el sábado desde Yaguachi, provincia de Guayas, el Jefe de Estado aprovechó para desbaratar la afirmación de Nebot, quien señaló como ejemplo que con la nueva Ley de Plusvalía, si una persona compra una casa en $ 40.000 y la vende en cuatro años a $ 80.000 pagará $ 13.000 de impuestos.

“¿Quién de ustedes tiene la fortuna de comprar una casa a $ 40.000 y venderla después de cuatro años a $ 80.000, al doble? Está hablando para el uno sobre un millón”, sostuvo el Mandatario, al subrayar que la mayoría de los ecuatorianos compra las casas no para especular, sino para convertirla en un hogar, endeudándose a 12 o 15 años.

Tras recordar que casi el 40% de familias ecuatorianas no tiene casa propia y son las que van a pagar $ 80.000 por esta casa, señaló que con la ley se protege a los compradores. Aclaró que en el supuesto de que la casa de $ 40.000 se la venda en $ 80.000 en cuatro años, como dice Nebot, esos $ 40.000 de ganancia, incluso pagando los $ 13.000 de impuestos, serían $ 27.000 los que quedan de ganancia.

Pero si se vende esa misma casa en cuatro años a $ 62.000 habría una ganancia de $ 22.000; es decir, de más del 50%, “paga cero con la nueva ley, con la Ley de Plusvalía anterior paga bastante, con la nueva ley paga cero”, subrayó.

Para el Jefe de Estado, tampoco se puede permitir que en cuatro años se gane el ciento por ciento, “eso se llama especulación, por eso la ley evita las burbujas inmobiliarias, porque si vendiendo a $ 62.000 la casa, en cuatro años, paga cero de impuesto, pero si la vende a $ 80.000 va a ganar solo $ 27.000, $ 5.000 más, ¿qué es lo que hace? La vende a $ 62.000, no a $ 80.000”, dijo.

El Primer Mandatario fue enfático al señalar también que solamente hay tres maneras de que una casa pase de $ 40.000 a costar $ 80.000 en cuatro años, como ejemplificó Nebot. “Que se vaya contra una obra pública muy importante y esa obra pública el beneficio, ese plusvalor no debe ser privatizado por pocas familias, sino compartido con la ciudadanía y eso es lo que hace la nueva ley”.

El segundo caso es el cambio del uso del suelo, “ese valor, fruto de decisiones de autoridad pública debe ser para la ciudad y no privatizado”; y el tercer caso, donde no existe creación de valor, es por especulación. “Es la misma casa, es la transferencia de valor del vendedor al comprador, eso es abuso de poder”.El presidente Correa también reprochó que políticos, como el candidato presidencial del Acuerdo Nacional por el Cambio, Paco Moncayo, sean detractores de la ley y llamen a desconocerla, cuando antes estaban de acuerdo que se pague el impuesto a la plusvalía.

Puso de ejemplo declaraciones de presidenciables emitidas en Teleamazonas el 29 de noviembre, donde señala estar de acuerdo, mientras que hace pocos días a diario El Universo le dijo lo contrario. Por ello el Jefe de Estado hizo un llamado a la ciudadanía a no dejarse engañar y buscar información confiable y oficial, como la que se encuentra en la página del Servicio de Rentas Internas (SRI), que incluso presenta una calculadora y datos que evidencian que de ninguna manera el cuerpo legal afecta a gran parte de la población.

Lo que dice la ley

Como está estipulada, la nueva Ley de Plusvalía propone el pago del 75% sobre la ganancia extraordinaria de bienes, cuando esta supere los 24 salarios básicos unificados ($ 8.784). Es decir, si la ganancia por la venta de un inmueble es mayor a esa cantidad, el vendedor deberá pagar el porcentaje, siempre y cuando sea la segunda vez que realice la transferencia del bien desde la vigencia de la ley y su ganancia no esté debidamente justificada.

La ministra de Vivienda, María de los Ángeles Duarte, subrayó que lo que se plantea en la ley es “una reforma al Código Orgánico de Ordenamiento Territorial, con el objetivo de que se pueda construir vivienda social o más accesible a la gran mayoría de la población”. (I)

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