El presidente de la República, Rafael Correa, concedió una entrevista a la cadena CNN en donde hizo una evaluación de la visita del Papa Francisco a Ecuador. En ese diálogo, con el corresponsal José Ley, el gobernante aseguró que el líder la Iglesia Católica "aprecia mucho el proceso que se está llevando acabo en Ecuador" y que ciertos sectores han tergiversado la frase dicha por Francisco en el aeropuerto Mariscal Sucre, el pasado domingo, cuando señaló que el "pueblo ecuatoriano se ha puesto de pie con dignidad".

"El Papa aprecia mucho el proceso que se está llevando acabo en Ecuador, incluso eso quisieron tergiversar cuando el Papa a su llegada, en su saludo dijo: el pueblo ecuatoriano se ha puesto de pie con dignidad... Lo dice por la Revolución Ciudadana, por todos los cambios que hemos tenido, reducción de la pobreza, la revolución educativa, la revolución sanitaria", expresó el Jefe de Estado ecuatoriano.

Correa resaltó que "para nosotros es una inmensa alegría, es la primera visita oficial apostólica del Papa a su Patria Grande, a Latinoamérica, así que no acabaremos nunca de agradecerle al Papa Francisco por su deferencia”, dijo, al tiempo de reflexionar sobre el significado de tener por primera vez en la historia un Pontífice latinoamericano.

Según el Mandatario, este cambio radical de la Iglesia al elegir a un latinoamericano, apuntaría a una mayor preocupación por el Tercer Mundo, los pobres y los problemas sociales. Para el Mandatario, la venida de Francisco es un “vendaval de frescura” para América Latina, para Ecuador y la Iglesia mundial en general.

Sobre el llamado al diálogo planteado por el régimen con diversos sectores sociales para debatir sobre la equidad en el país, el presidente aseguró que siempre estará abierto al diálogo, "pero hay que gente que nunca ha querido dialogar".

A la pregunta hecha por Levy sobre si el papa Francisco podría mediar en el país, Correa señaló: "Mediadora de qué. Siempre estamos abiertos al diálogo, pero hay que gente que nunca ha querido dialogar. Hemos tenido un ataque desde el inicio, devastador, malintencionado, tratando de dañar la reputación del Presidente, tergiversando la verdad (...) Esa es la clase de oposición que enfrentamos (...) Es un momento duro para el Gobierno. Acaba de salir la encuesta del fin de semana, 65% de apoyo popular. Cuando se tiene tremendo respaldo popular (...) qué mediación se necesita".

Al finalizar Correa emplazó nuevamente a la ciudadanía ecuatoriana a dialogar, pero advirtió que "cuando hay gente en la calle fracturándole la pierna a los policías para querer tomarse el Palacio de Carondelet, qué se puede dialogar con esa gente, primero que depongan la violencia". (I)