El presidente Guillermo Lasso lanzó este miércoles 1 de junio del 2022, en el marco del Día del Niño en el Ecuador, el bono de los 1.000 días. Este incentivo económico busca disminuir y prevenir la desnutrición crónica infantil, que afecta a 3 de cada 10 menores de dos años. 

De manera inicial, 37.000 madres resultarán beneficiadas con el bono, mientras que hasta 2025 se espera que 84.000 mujeres sean acreedoras. Este mecanismo de ayuda social se repartirá entre mujeres gestantes o con niños de hasta dos años y que vivan en condiciones de vulnerabilidad. 

“No podemos seguir un día más sin atender este grave problema que afecta al futuro del Ecuador”, manifestó el presidente Guillermo Lasso, en el evento de lanzamiento en Riobamba, provincia de Chimborazo. Además, el Ministerio de Inclusión Económica y Social prevé ejecutar otro programas como ‘Creciendo con Nuestros Hijos’, que atenderá a 203.000 infantes; los Centros de Desarrollo Infantil, para 85.000 niños; y el proyecto de ley de la Primera Infancia, para priorizar los derechos de los menores de edad.

Funcionamiento del bono

Las madres gestantes que estén interesadas en aplicar al bono podrán hacerlo a través del Ministerio de Inclusión Económica y Social. Los pagos se reciben mediante cuenta bancaria o en las ventanillas de la red de puntos pagos a escala nacional.

El incentivo consiste en una transferencia fija y tres montos adicionales que se otorgarán a las madres que cumplan con ciertos requisitos durante los dos años de vida de sus hijos. Cada mes, las progenitoras recibirán 50 dólares mensuales, como apoyo para su vinculación con los servicios de salud y la alimentación nutritiva.

En cuanto a las transferencias adicionales, estas se dividen en tres etapas. La primera será entre el periodo de gestación, nacimiento y registro temprano; con un valor de 90 dólares, pero siempre y cuando se asista a al menos tres controles durante el embarazo y se inscriba su nacimiento en el Registro Civil antes de los 45 días de vida.

La siguiente etapa será de 120 dólares en el primer año de edad, cuando el niño haya acudido a más de seis controles de salud. La tercera y última etapa será a los dos años del pequeño y tendrá un monto también de 120 dólares. En esta la condicionante es que la madre haya llevado a su hijo a al menos cuatro controles en su segundo año de vida.

“Con ello son beneficiados los niños, las madres, la sociedad y el país entero”, declaró el presidente Guillermo Lasso.