En la zona de La Comuna y La Gasca se realiza una intervención integral en las quebradas. En estos sectores se han colocado sistemas de alerta temprana para que la población conozca en qué momento se produjo un deslave y, por ende, se movilicen a una zona segura. Esto se reforzó en el marco de la etapa invernal. 

Jorge Rivera, asistente técnico de la Unidad de Mantenimiento de Captaciones en Quebradas, explicó que los trabajos incluyen el mantenimiento y la limpieza con una excavadora de oruga y volquetas en la quebrada El Tejado. Además, mencionó que se realiza el monitoreo permanente e  inspecciones para definir los tipos de trabajo. 

Además, se ejecutan 138 estructuras de captación de la ciudad. También se realizan sobrevuelos con drones para verificar cualquier deslizamiento o incremento del caudal. 

El funcionario municipal comentó que hay una planificación semestral donde se revisa la capacidad del embalse, los diques o reservorios y se prioriza la atención, para evaluar cuáles son más vulnerables y realizar la extracción del material de las rejillas o entradas de los colectores. Temporalmente -expresó- se aloja el material a un costado de la quebrada para que pierda humedad y luego se traslada a una escombrera.

Hasta el momento está en ejecución el contrato de obras de mitigación en estructuras de captación de las quebradas: El Tejado, y Armero de Ascázubi. Registra un 80% de avance por un monto de USD 235.000.  Los trabajos en la quebrada Caicedo ya concluyeron en la limpieza de la estructura de captación, cauce, dique de retención de sólidos y un reservorio.

“Hay que tener en cuenta que las quebradas son drenajes naturales que no deben ser utilizados como sitios de escombros y disposición de basura. La gente debe tener conciencia que este material tapa las alcantarillas y colectores y genera inundaciones”, añadió Rivera.