Sesión 36 de parlamento libanés para elegir presidente fracasa
Nabih Berri, jefe del parlamento libanés, aplazó nuevamente hoy la elección del presidente del país, luego de fracasar, por 36 ocasiones consecutivas, una convocatoria para poner fin a 22 meses de vacío en ese cargo.
Apenas 50 de los 128 diputados asistieron a la sede del hemiciclo en la plaza Nehme del centro de Beirut, por lo que la sesión quedó muy por debajo del quórum necesario de los dos tercios para ser válida, de ahí que Berri fijó para el 23 de marzo la audiencia número 37.
Previo a la reunión de los legisladores, se daba por seguro que la falta de quórum por ausencias previamente anunciadas y las hondas divisiones entre los principales bloques políticos harían fallida la sesión y prolongaría el vacío presidencial que vive este país árabe.
Después de 35 convocatorias consecutivas, los 128 parlamentarios de El Líbano siguieron atascados en la elección del jefe del Estado en una coyuntura agravada por tensiones más marcadas entre Arabia Saudita e Irán, dos actores regionales clave que rompieron relaciones en enero.
El Líbano carece de presidente desde que Michel Sleiman concluyó su mandato el 25 de mayo de 2014, debido a la falta de entendimiento entre los bloques 8 de Marzo, encabezado por el movimiento Hizbulah y aliado de Teherán, y 14 de Marzo, liderado por Mustaqbal y adepto de Riad.
Hizbulah (Partido de Dios) y sus aliados, que proponen como presidente a Michel Aoun, jefe del bloque Cambio y Reforma, han boicoteado las sesiones previas de la cámara en señal de rechazo a la candidatura de Samir Geagea, líder del partido Fuerzas Libanesas que es postulado por la coalición rival.
Analistas sostienen que dada la gran influencia que el reino saudita y la república islámica tienen en El Líbano, será difícil la elección del jefe del Estado, a menos que ambas potencias lleguen a una suerte de reacercamiento para rebajar tensiones regionales, algo impensable en el escenario actual.
Los diputados de Mustaqbal (Futuro) y sus aliados habían anunciado una asistencia significativa para "expresar su compromiso con el juego democrático y la Constitución", pero sin ceder a ninguno de los reclamos del 8 de Marzo.
Por lo mismo, los diputados aliados de Hizbulah, como el líder del Movimiento Marada, Suleiman Franjieh, adelantaron que no participarían en la sesión de este miércoles, a pesar de la exhortación hecha por el jefe de Mustaqbal (Futuro), Saad Hariri, quien lo propuso para el cargo presidencial.
El exprimer ministro Hariri, aliado saudita, pretendió que Franjieh retara a su compañero de bloque y candidato de Hizbulah, Michel Aoun, pero el segundo declinó concurrir porque su presencia en el hemiciclo "podría complicar las cosas, en lugar de resolverlas", según comentó. (I)