La II Cumbre de la Celac comenzó este martes en La Habana, presidida por el mandatario cubano Raúl Castro, en presencia gobernantes de América Latina y el Caribe, que guardaron un minuto de silencio en memoria del fallecido presidente venezolano, Hugo Chávez.

"Lamentamos profundamente la ausencia física de uno de los grandes líderes de nuestra América, el inolvidable presidente venezolano Hugo Chávez", dijo Castro, pidiendo al plenario guardar un minuto de silencio en su memoria.

El cónclave presidencial comenzó a las 09H40 locales con la interpretación del himno nacional cubano y la presentación de una banda típica de la isla, que tocó la canción cubana "Guantanamera" y otros temas latinoamericanos durante 10 minutos.

Antes de abrir el cónclave de dos días, Raúl Castro, de 82 años y vestido con traje azul oscuro y corbata -en vez de su tradicional uniforme de general-, recibió a cada uno de los mandatarios acompañado del canciller cubano, Bruno Rodríguez, en la entrada del recinto ferial "Pabexpo", sede de la reunión, en el oeste de la capital.

Después de la inauguración llegó el ecuatoriano Rafael Correa y para más tarde eran esperados los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos, Perú, Ollanta Humala, y Chile, Sebastián Piñera, este último acompañado de la mandataria electa Michelle Bachelet.

En su discurso, el presidente cubano afirmó que "los llamados centros de poder" persisten en controlar a los países de Latinoamérica y el Caribe para beneficiarse de sus recursos. Añadió que a pesar de los progresos, continúan las amenazas a la paz y la injerencia externa en la región.

"No podemos olvidar la larga historia de intervención en los asuntos internos, invasiones militares y sangrientos golpes de Estado", advirtió.

En su discurso se refirió "al sistema global de espionaje de las comunicaciones implementado por Estados Unidos, del que fueron blanco jefes de Estado y Gobierno, organismos internacionales, partidos políticos, empresas y ciudadanos de la región", subrayó.

"Se trata de una flagrante violación del derecho internacional y la soberanía de los Estados", apuntó.

Agregó que el empleo encubierto e ilegal de los sistemas informáticos de otras naciones para agredir a terceros países podría provocar conflictos internacionales.

"El único camino para prevenir y enfrentar estas novedosas amenazas es la cooperación mancomunada entre los Estados para evitar que el ciperespacio se convierta en teatro de operaciones militares", expresó Raúl Castro.

Al respecto saludó la iniciativa brasileña de efectuar en Sao Paulo, en abril de este año, la Reunión Multisectorial Global sobre Gobernanza de Internet.

Igualmente, defendió la propuesta de Cuba de proclamar a Latinoamérica y el Caribe como una zona de paz que destierre para siempre la guerra, la amenaza y el uso de la fuerza.

La II Cumbre de Celac sesionará hoy y mañana. Los gobernantes planean suscribir el miércoles, al cierre de la cita, una declaración de más de 80 puntos con temas que van desde la lucha contra la pobreza al desarme, que fueron preparados por delegados de los 33 países del bloque el fin de semana y afinados por los cancilleres el lunes.

Los analistas estiman que la cumbre significa una potente señal a Estados Unidos de que esta región de 600 millones de habitantes ya no acepta el aislamiento de Cuba, aunque no va a cambiar la política de Washington, que sigue anclada en la Guerra Fría.

La cumbre servirá, además, para que los gobernantes de Perú, Ollanta Humala, y Chile, Sebastián Piñera, se vean las caras el miércoles por primera vez tras un histórico fallo sobre límites marítimos que favoreció a Lima, dictado por la Corte Internacional de La Haya el lunes.