El tribunal tiene 180 días para ratificar o invalidar la decisión
El Parlamento destituye a la presidenta surcoreana
Seúl.-
El Parlamento surcoreano destituyó este viernes a la presidenta surcoreana, Park Geun-Hye, envuelta en un escándalo de corrupción que la enlaza con su amiga Choi Soon-sil, apodada por la prensa la ‘Rasputina surcoreana’. La votación se celebró mientras centenares de personas desde las afueras del Parlamento gritaban “destituyan a Park”.
La remoción, aprobada por 234 votos a favor (34 más de los necesarios -200-) y 56 en contra, está a la espera del dictamen del Tribunal Constitucional que debe ratificar o invalidar la decisión parlamentaria. Mientras tanto, los poderes presidenciales son transferidos al primer ministro Hwang Kyo Ahn.
El tribunal tiene 180 días para decidir. Park tendrá que dejar formalmente el cargo si 6 de los 9 magistrados de la corte respaldan el juicio político y se convocaría a elecciones en el plazo de 60 días.
Para que la remoción del cargo se confirme se requiere el voto a favor de 6 de los 9 jueces del Constitucional y el dictamen puede tardar seis meses. De tomarse su expulsión se adelantarán las elecciones presidenciales, previstas para finales de 2017. Su mandato finalizaba en febrero de 2018.
La política es hija del dictador Park Chung-Hee y pasa a la historia como la primera mandataria elegida democráticamente que no concluye su gestión de cinco años.
Su amiga, la ‘Rasputina coreana’
El caso que sacudió la política surcoreana gira alrededor de Choi Soon-sil, confidente e íntima amiga de Park Geun-Hye. Ella es acusada de influir en las decisiones políticas de la presidenta y enriquecerse.
Según el diario El País de España, el detonante fue porque se aprovechó de los recursos de las instituciones. Choi obtuvo cerca de $ 70 millones en “donaciones” de algunas de los principales conglomerados del país. El dinero tenía en teoría como destino dos fundaciones sin ánimo de lucro que dirigía.
Apodada ‘Rasputina’ (Rasputín fue un monje ruso que influyó en las decisiones de la monarquía) por la prensa, Choi Soon-sil fue detenida en noviembre y está a la espera de un juicio por coacción y abuso de poder. Este proceso es el resultado de semanas de crisis, el pasado sábado 2’000.000 de personas salieron a las calles de Seúl para pedir a los partidos políticos que destituyeran a Park.
La presión de la opinión pública fue clave para que un número suficiente de diputados del partido conservador de la mandataria, el Saenuri, decidiera apoyar la moción junto a la oposición.
La corrupción en las altas esferas es una rémora para la democracia surcoreana y el palacio presidencial no fue la excepción.
Desde las primeras elecciones libres en 1987 los presidentes fueron objeto de investigaciones y el exmandatario Roh Moo-Hyun se suicidó cuando era investigado por un caso de corrupción que involucraba a su familia. En un país donde la clase política tiene vínculos estrechos con los negocios, muchos familiares se aprovecharon de favores.
Park se presentó como alguien diferente; su padre Park Chung-Hee gobernó Corea entre 1961 y 1979, y fue asesinado. Cinco años antes, en 1974, falleció su madre tras un atentado. Alejada de sus hermanos y sin hijos, la apodada ‘princesa de hielo’ era considerada como inmune al nepotismo.
La imagen de una mujer apegada al rigor y abnegada encantó a la base conservadora del partido oficialista Saenuri, especialmente a los electores de más edad que la veían como una virtuosa superviviente de una tragedia personal. La conmoción por las revelaciones del caso fue mayor.
Los diputados también añadieron como motivo para apoyar la moción de destitución su papel tras el naufragio de un ferry en 2014 en el que murieron 304 personas, la mayoría eran estudiantes.
La gestión del gobierno de la catástrofe fue muy criticada y la prensa se pregunta por qué Park tardó siete horas entre el momento del naufragio y la primera reunión del gobierno para tratar sobre el tema. (I)
DATOS
El presidente interino, Hwang Kyo Ahn, es un antiguo fiscal que no fue elegido en las urnas, pero deberá afrontar desafíos como el programa militar norcoreano, la presión china contra el escudo antimisiles estadounidense THAAD que Corea del Sur tiene previsto desplegar en su territorio o el auge mundial del proteccionismo.
Choi Soon-sil, de 60 años, no desempeñó un cargo público, sin embargo tuvo acceso a documentos clasificados y participó en la redacción de discursos oficiales de su amiga, la presidenta.
Los diputados también añadieron como motivo para apoyar la moción de destitución su papel tras el naufragio de un ferry en 2014 en el que murieron 304 personas, la mayoría eran estudiantes. Su gobierno se reunió siete horas después del desastre restando importancia al caso. (I)