El presidente de EE.UU., Barack Obama, se reúne hoy en la Casa Blanca con una serie de estrellas artísticas y del mundo de la comunicación hispanas, como Emilio Estefan, Eva Longoria y José Díaz-Balart, para tratar la reforma migratoria.

La reunión, descrita por la Casa Blanca como un encuentro con "hispanos influyentes de alrededor del país", se centrará en la importancia de reformar el sistema de inmigración y cómo colaborar para "promover una conversación nacional constructiva sobre este importante asunto", a la vez que se promueve un consenso bipartidista en el Congreso.

Por parte de la Casa Blanca participan en la cita los asesores presidenciales Valerie Jarrett y David Plouffe, así como la directora del Consejo de Política Interna, Melody Barnes, y la directora de Asuntos Intergubernamentales, Cecilia Muñoz.

Entre la lista de invitados a la reunión que ha facilitado la Casa Blanca, se cuenta con la asistencia de estrellas del mundo de la comunicación como Don Francisco, José Díaz-Balart, María Elena Salinas o Eddie "Piolín" Sotelo.

Asimismo, se espera la llegada del empresario artístico Emilio Estefan y las actrices América Ferrera, Rosario Dawson o Eva Longoria.

El presidente de EE.UU., que prometió durante su campaña electoral la reforma migratoria en el primer año de su mandato, asegura que sigue empeñado en conseguir este objetivo, pese a la falta de apetito en el Congreso para abordar el asunto.

El mandatario ganó los comicios con el 67 por ciento del voto hispano.

Sin embargo, la falta de una reforma le ha valido fuertes críticas de grupos defensores de los inmigrantes -que denuncian un aumento en las redadas y deportaciones- y de legisladores demócratas en el Congreso.

La semana pasada, Obama ya encabezó una reunión con decenas de líderes cívicos, empresariales, religiosos, y sindicalistas, entre los que figuraron el reverendo Al Sharpton o el exgobernador de California Arnold Schwarzenegger, para evaluar vías que permitan impulsar la reforma.

En un encuentro con votantes en la sede de Facebook en Palo Alto (California), también la semana pasada Obama insistió en la necesidad de una reforma que aumente la seguridad fronteriza y abra una vía a la legalización de los indocumentados.

La reforma migratoria "no la hemos logrado, pero es algo que me interesa profundamente. Es lo correcto para el país, y quiero lograrla mientras sea presidente", dijo Obama.

"Tenemos que corregir el sistema entero. Primero que todo, hagamos que el sistema de inmigración legal sea más justo y más eficiente de lo que es", señaló.