Tras las elecciones presidenciales del 28 de julio en Venezuela, cientos de personas iniciaron un nuevo éxodo hacia Brasil, buscando escapar del régimen de Nicolás Maduro.

En la ciudad fronteriza de Pacaraima, se observan largas filas de migrantes venezolanos que esperan recibir alimentos y asistencia básica en un refugio administrado por una iglesia católica.

Las solicitudes de asilo en Brasil aumentan un 25% desde las elecciones, lo que refleja la creciente desesperación de la población venezolana.

El éxodo generó imágenes dramáticas de familias enteras que buscan refugio y comida en la frontera.

Dos videos, dias 4 y 5, identcas imagenes. Frontera entre #Venezuela y #Brasil. Se agiganta el exodo en medio del #FraudeElectoral. pic.twitter.com/iQXA2sgUR9

— Mario Vallejo (@MVallejoTV) September 6, 2024

Según un reportaje de Reuters, "los migrantes expresan su desilusión y frustración tras las elecciones, sintiéndose obligados a huir en busca de un futuro mejor para sus hijos".

En agosto, Pacaraima recibió más de 11.000 nuevos migrantes, un número mayor que en meses anteriores, lo que ha puesto presión sobre las autoridades locales.

El gobierno brasileño, encabezado por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, prometió gestionar la situación con "responsabilidad y respeto".

La operación "Acolhida", creada en 2018 para atender a los migrantes venezolanos, se intensifica en la frontera y ofrece vacunación y orientación a quienes llegan. 

Más de 2,2 millones de venezolanos carecen de estatus legal, y la mayoría enfrenta dificultades para integrarse, encontrar vivienda y garantizar su protección. 

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— El Telégrafo Ecuador (@el_telegrafo) September 11, 2024