El presidente de Argentina, Mauricio Macri, aseguró ayer que recibió un país sumergido en la pobreza, con altos índices de desempleo e inflación, algo de lo que responsabilizó al anterior gobierno kirchnerista. Expertos señalan que esos índices se dispararon tras la liberación del cepo al dólar, en poco más de 2 meses de gestión.

En su discurso, durante la ceremonia de apertura del 134° período de sesiones ordinarias en el Congreso, el mandatario hizo una encendida crítica a la gestión kirchnerista (2003/2015),  a la que acusó de dejar un Estado “desordenado y mal gestionado”.

A partir de allí, leyó un largo listado de temas con pocas precisiones sobre el estado de situación con la que asumió la administración nacional en diciembre del año pasado y acusó al gobierno anterior de ser el autor de “un Estado que ha mentido sistemáticamente” y “destruir la credibilidad”, destacó Página 12.

Macri dijo que durante los últimos años “se ocultó información” sobre la situación del Estado y aseguró que “el déficit total es del 7% del PBI”. Además, precisó que entre 2006 y 2015 “se pagaron impuestos por $ 694 millones, más que en la década del noventa” y consideró que, pese a eso, “hay un Estado con nula o poca capacidad para responder a sus obligaciones”. “El modelo de inclusión y crecimiento del que nos hablaron nos llevó a la pobreza y la exclusión”.

Responsabilizó también a las gestiones de Néstor y Cristina Kirchner de “generar una inflación acumulada del 700% en los últimos 10 años a causa de la utilización del Banco Central para abastecer gasto público y pagar deuda”.

Macri habló también de generar más empleos, y a la fecha ha dejado sin trabajo a 41.921 trabajadores estatales, provinciales y municipales, así como en diversas ramas del sector privado.

El presidente justifica estos despidos y dice que los trabajadores públicos en cuestión son “ñoquis”, es decir, empleados que no cumplen sus funciones ni acuden a sus puestos de trabajo, por lo que, no conforme con esa cifra, solicitó la revisión de otros 63.000 contratos, así es la generación de empleo que Macri promete.

El mandatario argentino alega que la “falta de empleo” se debe a la inflación que el país heredó de la gestión anterior, pero es que la nación actualmente supera una inflación del 30% y una devaluación del peso del 40%, tras la liberación del dólar a tan solo 2 meses de gestión.

Macri tocó el tema del sector eléctrico y se lavó las manos diciendo que la causa de los cortes se debe a “la ausencia de incentivos en la inversión. Nuestro país tiene déficit energético”.

Así justificó el presidente el incremento de las tarifas de los servicios públicos, como el caso de la luz eléctrica, que sufrió un aumento entre 200% y 300% a partir de febrero. En el caso de las empresas, éstas tendrán que pagar hasta 500% de la tarifa habitual.

Aún así, en contraste, en su discurso volvió a dejar claro cuáles son sus principales desafíos: pobreza cero, unir a los argentinos y derrotar al narcotráfico. “El desafío de unir a los argentinos es el más importante de todos”, acotó.

Fondos buitre

Su nueva meta contra el pueblo argentino no fue dejada a un lado, Macri le pidió al Congreso “conseguir los consensos necesarios” para lograr el paquete de leyes, que según él definirá la salida del país del default, luego del acuerdo alcanzado el pasado lunes con los holdouts o fondos buitre.

Macri necesita la derogación de las leyes Cerrojo y Pago Soberano para cancelar a los fondos buitre más de $ 4.000 millones, mediante bonos que llenarían de deudas a la nación, según lo acordado en un plazo de 6 semanas.

El Ejecutivo dice que pretende eliminar las leyes promulgadas en 2015 para proteger la estabilidad financiera del país; pero, según expertos, estaría entregando la soberanía nacional.

El mediador en Nueva York, Daniel Pollack, fue claro: las partes podrán acordar una extensión de la fecha límite de pago, prevista para el mediodía del 14 de abril, y el saldo deberá realizarse en efectivo y en dólares, de no ser así el preacuerdo caerá”.

El ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, destacó que el país quedó ahora en la línea de largada para recuperar el crecimiento. “Podemos decir por primera vez que Argentina empieza a salir del default”, subrayó el secretario de Estado. (I)