La Justicia chilena acogió hoy un recurso de protección presentado por la Gendarmería para poder hospitalizar, en caso de que sea necesario, a 4 presos mapuches que llevan 50 días en huelga de hambre para exigir la anulación del juicio en el que fueron condenados.

"Se autoriza a ese servicio para que adopte las medidas conducentes para internar en caso de urgencia a los huelguistas en un centro hospitalario, con el objeto de que se les entregue una total y completa atención médica", señala la resolución de la Corte de Apelaciones de Temuco.

El tribunal señala además que ese permiso se otorga "sin perjuicio de que se haga uso de las demás facultades que le confiere a ese servicio su ley orgánica y reglamento institucional, en cuanto a la alimentación de ellos, de forma tal de asegurarles sus vidas y su integridad físicas".

Antes de que el tribunal diera a conocer su decisión, la portavoz de los presos, Natividad Llanquileo, advirtió de que si finalmente los jueces concedían esa autorización, los presos se resistirían a la alimentación forzosa.

Héctor Llaitul, Ramón Llanquileo, José Huenuche y Jonathan Huillical iniciaron su ayuno el pasado 16 de marzo, cuando fueron condenados a penas que van de 20 a 25 años de prisión por el ataque a un fiscal, que resultó ileso, y por el robo con intimidación a un agricultor.

Con esta huelga los presos presionan para ser juzgados "por un tribunal imparcial" y para que no se empleen procedimientos amparados por la ley antiterrorista en los procesos contra los mapuches, pese a que en su caso se aplicó en definitiva la legislación común.

Los cuatro reos, encarcelados en Angol, a 600 kilómetros de Santiago, en la región de La Araucanía, forman parte de los más de 30 internos que el año pasado mantuvieron una huelga de hambre de 80 días con las mismas demandas y también de mejores condiciones carcelarias.

Mientras tanto la Corte Suprema debe fijar para los próximos días la audiencia en la que se presentarán los alegatos del recurso de nulidad, presentado por la defensa y acogido por el máximo tribunal, que busca dejar sin efecto el juicio que los condenó y celebrar otro.

Los hechos por los que estos presos fueron juzgados se enmarcan en el denominado conflicto mapuche, que enfrenta en el sur de Chile a comunidades indígenas con empresas agrícolas y forestales por la propiedad de tierras que los mapuches consideran ancestrales.