Caracas.- El Gobierno venezolano repudió los hechos de violencia que ocurrieron el martes durante una sesión en el Parlamento, que fue escenario de una trifulca entre diputados chavistas y opositores. “Han llenado de odio una parte de la sociedad que actúa automáticamente y nosotros tenemos que estar alerta. No estamos de acuerdo con la violencia”, expresó el presidente Nicolás Maduro desde el Teatro Junín, en Caracas, donde sostuvo un encuentro con trabajadores.

El jefe de Estado informó que el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Diosdado Cabello, tomará las medidas con autoridad y disciplina para que no se repitan hechos como estos, “porque nosotros tenemos que buscar la paz y el respeto a las leyes”.

Asimismo, la segunda vicepresidenta del Parlamento Nacional, Blanca Eekhout, rechazó en nombre de la directiva del Poder Legislativo los hechos violentos propiciados por sectores antichavistas.

Los parlamentarios de oposición acudieron a la sesión del día con pitos y bocinas que tocaron desde que inició la actividad en la AN. Mientras el secretario del Parlamento leía el primer punto, la bancada de la derecha intentaba interrumpirlo con gritos, aplausos y otros sonidos, según publicó la Agencia Venezolana de Noticias (AVN).

Esta situación se repitió mientras los diputados socialistas intervenían para discutir sobre créditos para proyectos de desarrollo.

El presidente del Parlamento, Diosdado Cabello, insistía a la bancada revolucionaria mantener la calma y continuar con el debate. Pero los diputados de la oposición insistieron en sabotear la sesión y sacaron  una pancarta en la que se leía: “Golpe al Parlamento”,  lo que fue considerado como claro acto de provocación a la bancada socialista.

En los videos divulgados sobre el hecho, es difícil precisar el momento en el que comenzaron los incidentes en los que resultaron heridos los asambleístas derechistas Julio Borges y María Corina Machado, así como la socialista Odalis Monzón, entre otros.   

Los asambleístas socialistas rechazaron las acciones de odio y de violencia que, desde su perspectiva, fueron generadas por los parlamentarios de derecha, quienes se suman a las acciones fascistas que se han reproducido en el país luego de las elecciones presidenciales del 14 de abril, cuando el ex candidato Henrique Capriles Radonski se negó a aceptar su derrota y llamó al desconocimiento de las instituciones del Estado.

Cabello acusó ayer a los diputados opositores de preparar un guión para atentar desde dentro contra el Parlamento.

Con el rostro ensangrentado y un hematoma en el ojo, el diputado opositor Julio Borges, por su parte, denunció en el canal privado Globovisión que fueron golpeados varios diputados y responsabilizó al  presidente de la Asamblea Nacional “por querer someternos a un examen hasta que nosotros reconozcamos a Nicolás Maduro”.

“Nosotros lo que hicimos fue sacar en silencio esta pancarta: Golpe al Parlamento”, explicó Borges, del opositor partido Primero Justicia de Capriles, describiendo que luego fueron golpeados por varios parlamentarios oficialistas.

Por su parte la parlamentaria oficialista Odalis Monzón también denunció haber sido “atacada por la bancada opositora” y agradeció a sus compañeros por “defenderla”, en declaraciones al canal oficial de la Asamblea Nacional.