El ministro de Educación chileno, Felipe Bulnes, aseguró este domingo que el Gobierno sigue "empeñado" en lograr un diálogo con el movimiento estudiantil, que desde el pasado mayo está movilizado a favor de una mejor educación pública, gratuita y de calidad.

"Hemos hecho un llamado a los estudiantes a dialogar sin imposiciones de ningún tipo y sin excluir ningún tema de la mesa, y esperamos que se acoja este llamado", dijo Bulnes a Radio Cooperativa después de asistir al tedeum de Fiestas Patrias.

En esa ceremonia, el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, hizo un llamado a que se logre un "diálogo responsable" para destrabar el conflicto.

El ministro de Educación apuntó que el Ejecutivo no puede "forzar" a los estudiantes a entablar una conversación sobre el modelo educativo, aunque recalcó que tiene "las puertas abiertas" para discutir el asunto.

La Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) expresó su rechazo esta semana a la respuesta del Gobierno a cuatro condiciones planteadas por los jóvenes para iniciar un diálogo.

El Ejecutivo rechazó dos de esas condiciones: flexibilizar el semestre académico en las universidades y frenar el envío al Congreso de proyectos de ley relativos a la enseñanza.

La Confech rechazó la respuesta y convocó a nuevas movilizaciones y a un paro nacional la próxima semana.

El ministro Bulnes dijo hoy que el Gobierno seguirá trabajando en la resolución del conflicto.

"Como gobierno nuestra responsabilidad no solo es dialogar, sino también avanzar en construir reformas que vayan a mejorar los mismos problemas que están poniendo los estudiantes arriba de la mesa", indicó.