Decenas de miles de personas conmemoraron el quinto aniversario de la “Revolución de los Paraguas”, que pedía más libertades y derechos.

Con choques entre la Policía y manifestantes terminó este sábado 28 de septiembre de 2019, la marcha conmemorativa del quinto aniversario del fin de la "Revolución de los Paraguas” en Hong Kong. Decenas de miles de personas salieron a las calles para recordar ese hito de la desobediencia civil en la ciudad, que podría considerarse el antecedente directo de las actuales protestas prodemocráticas.

La manifestación se realizó de forma pacífica en el Parque Tamar, en el centro de Hong Kong, donde los presentes vestían ropas de color negro, como es tradicional en este tipo de protestas. Los presentes atendieron al llamado de la ONG Frente Civil de Derechos Humanos, responsable de las congregaciones más multitudinarias en contra de la ya retirada propuesta de ley de extradición.

"Creo que la gente está preparada para una lucha a largo plazo, porque no es fácil arrancar la democracia al Partido Comunista Chino”, dijo a la agencia AFP Yuan, una ingeniera de 29 años que se sumó a las protestas prodemocráticas de este año tras ver la represión que sufrían los manifestantes. "El comportamiento de la policía fue uno de los catalizadores", afirma Yuan, haciendo referencia a las acusaciones generalizadas de brutalidad policial lanzadas por los manifestantes.

Cinco años después, las mismas demandas

Este sábado no fue la excepción, y los enfrentamientos comenzaron entre grupos reducidos de manifestantes y las fuerzas de seguridad, que tras ser atacadas respondieron con gas pimienta. Cientos de manifestantes levantaron barricadas y bloquearon algunas de las principales calles de la ciudad. Terminado el mitin, la policía usó cañones de agua para dispersar a los más violentos, que respondieron lanzando ladrillos.

Además, según la Policía de Hong Kong, "radicales lanzaron cócteles molotov a las oficinas del Gobierno”. En 2014, durante la "Revolución de los Paraguas", los manifestantes pedían la introducción del sufragio universal para elegir al jefe del Ejecutivo local, una de las cinco demandas que aún hoy tiene el movimiento prodemocrático, y que incluyen también una investigación independiente sobre brutalidad policial o la amnistía a los arrestados, entre otras. (I)