El Senado de Chile aprobó con 31 votos a favor, tres en contra y una abstención la reforma tributaria con la que el Gobierno pretende destinar 1.200 millones de dólares al sector educativo del país.          

El Senado aprobó la medida el martes horas después de que la Cámara de los Diputados diera luz verde a la misma con 76 votos a favor, 29 en contra y cinco abstenciones, según informó el diario chileno La Tercera.

El acuerdo entre la centroizquierda y el gobierno derechista de Sebastián Piñera incluyó un aumento de impuestos a las empresas, la creación de un fondo de 4.000 millones de dólares para la educación, mayores aportes a las universidades públicas y una ampliación del beneficio de reducción tributaria por educación a los sectores más pobres del país.

El presidente Sebastián Piñera expresó su “alegría y satisfacción” por el acuerdo. La reforma tributaria chilena busca aumentar en 880 millones de dólares las recaudaciones fiscales con el fin de garantizar la cobertura pre escolar al 60% más vulnerable de la población y para avanzar en la cantidad de becas y créditos para los alumnos de educación superior.

En tanto, un grupo de estudiantes protestó desde las tribunas de la Cámara de Diputados en contra de la iniciativa, una respuesta del gobierno a los cambios estructurales que demanda el movimiento estudiantil desde 2011 en pos de una educación pública, de calidad, gratuita y sin fines de lucro.