La madrugada de ayer, el Consejo de Evaluación, Acreditación y Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior (Ceaaces) fue asaltado por cinco antisociales que se llevaron 14 computadoras de escritorio y una portátil, que contienen información relacionada con el proceso de calificación, suspensión y evaluación técnica realizada a las universidades y su personal en los últimos meses.

Los guardias de la institución, ubicada al norte de Quito, fueron sorprendidos, a las 02:00, por personas armadas que los amarraron para ingresar al edificio.

Nada de valor fue sustraído del lugar, únicamente las computadoras de los departamentos administrativos, técnicos y de la oficina del presidente del Ceaaces, Guillaume Long.

La noticia fue dada a través de la cuenta de Twitter de Long, quien explicó con asombro al constatar que los televisores plasmas no fueron sustraídos, únicamente los ordenadores que “contienen información sensible a nivel nacional, pero tenemos respaldos”, dijo Long.

Los funcionarios verificaron que los escritorios y los documentos fueron revueltos, especialmente de la secretaria general y de la oficina del abogado de la institución.

Miembros del Departamento de Criminalística estuvieron en el lugar para recoger evidencias y las posibles huellas digitales de los antisociales que intervinieron en el robo al Ceaaces.

El jefe de la Policía Judicial de Pichincha, Jorge Ortiz, resaltó el esfuerzo que realizan los agentes en esta investigación. Por su parte, Guillaume Long indicó que confían en el trabajo policial.

Los guardias de seguridad que fueron agredidos deberán rendir su versión para tratar de recabar más información  sobre el hecho.

El Ceaaces evaluó a 75 universidades a nivel nacional. A inicios de marzo, el Consejo de Educación Superior (CES) anunció medidas cautelares para los centros de educación que eran analizados por el Ceaaces. Lo que indicaba que sus autoridades no podían enajenar bienes.   

El 12 de abril de este año, el organismo junto con el CES presentaron un listado de 14 universidades que fueron clausuradas. Posteriormente, el CES, asignó administradores temporales para que se encargaran de hacer auditorías internas y externas de las universidades.

Hace dos semanas, René Ramírez, presidente del CES, anunció que las  instituciones de educación superior clausuradas, la mayoría, registraron una serie de irregularidades en la adquisición de bienes patrimoniales, así como la falta de liquidez en su presupuesto.

Incluso, el personal administrativo y docente no tenían al día sus pensiones del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).