El presidente de la República, Rafael Correa, recorrió este jueves junto a autoridades locales los pabellones de la exPenitenciaría del Litoral que actualmente alberga a 3443 personas privadas de la libertad (PPL), además de participar de forma simbólica en la demolición de esta cárcel. En este sitio se construirán nuevas instalaciones que albergarán a los reos, bajo el nuevo sistema de rehabilitación Social promovido por el Gobierno Nacional.

El Mandatario se subió a una pala mecánica con la que derrumbó una pared del antiguo centro de reclusión. "Esto es para derrumbar el viejo país, aquí no hay que dar marcha atrás", expresó.

Durante el recorrido, Correa recordó la serie de irregularidades evidenciadas en centros del país, "manejados" por los reos. "Con las nuevas cárceles el control lo tiene el Estado, son mucho mejores infraestructuras, hay cámaras de vigilancia, entonces saben que pierden su poder. Debemos estar muy atentos, porque va a haber nuevos intentos de fuga, debido a que no quieren pasar a las nuevas cárceles porque pierden el control", apuntó. 

Junto al Mandatario están el ministro coordinador de Seguridad, Homero Arellano; el ministro de Justicia (e), José Serrano, el viceministro del Interior, Javier Córdova, el gobernador del Guayas, Rolando Panchana, entre otros funcionarios.

El Jefe de Estado también recorrió el nuevo Centro de Privación de Libertad, zona 8, donde hace dos semanas fueron trasladados 3680 reos que se encontraban en la exPenitenciaría.