Alerta naranja y evacuaciones por el volcán Tungurahua
La Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos de Ecuador declaró el martes la alerta naranja por el aumento de la actividad del volcán Tungurahua, que está coronado por una columna de ceniza de 8 km de altura y que ha provocado la evacuación de algunas poblaciones.
El volcán, situado en el centro andino del país, se reactivó el pasado miércoles tras cuatro meses de relativa calma y hoy aumentó su actividad con la emisión continua de ceniza, que ya afecta a la navegación aérea en la zona, según la Secretaría.
El director del Instituto Geofísico de Ecuador, Hugo Yépez, explicó que la actual actividad del coloso se caracteriza porque "empezó de una manera rápida a cambiar una serie de parámetros, sobre todo una deformación a nivel de los flancos del volcán, por inyección de nuevo material (magma)", según unas declaraciones que recoge en su web el periódico oficial El Ciudadano.
"Este magma nuevo tiene muchos gases, tratan de abrirse camino y posiblemente reabran grietas", manifestó Yépez, quien no descartó que pueda salir magma a la superficie.
También hoy se registraron cinco explosiones, que sacudieron los ventanales de Baños, la principal localidad en las faldas del Tungurahua, de acuerdo con el Instituto Geofísico (IG) de la Escuela Politécnica Nacional.
Las autoridades han evacuado las poblaciones de Cusúa, Bilbao y Chacauco, donde residen 140 familias de forma permanente y 100 de manera itinerante.
El ministerio de Educación suspendió hoy las clases en esas poblaciones hasta el viernes, cuando se reanudarán "salvo que las condiciones naturales se mantuvieran o empeoraran", según indicó en un comunicado.
La ceniza volcánica está presente hasta una altura de 10.000 metros sobre el nivel del mar y la Secretaría de Riesgos cree que podría afectar a los aeropuertos de Manta y Esmeraldas y a las aerovías hacia Guayaquil y Salinas.
Mientras, en la zona de Bilbao el personal del Instituto Geofísico midió una capa de ceniza de 3 milímetros de espesor depositada durante 12 horas del día 24 de abril.
"La emisiones de ceniza están acompañadas por bramidos de diversa intensidad y por expulsión de material incandescente en forma de fuentes de lava, con bloques que ruedan por los flancos superiores del volcán", dijo hoy el Instituto en un informe.
Dada la deformación del flanco noroccidental del volcán detectada por los inclinómetros, los expertos creen que continúa el ingreso de magma a la cámara en su interior y hacia la superficie.
El Instituto estima que el volcán seguirá expulsando un volumen "de alto a moderado" de ceniza en los próximos "días a semanas", como ocurrió en agosto de 2001.
Alertó de que ya se constatan daños a los cultivos y que el material volcánico acumulado puede generar flujos de lodo que obstruyan las carreteras.
El Tungurahua, de 5.016 metros de altitud y situado a 135 kilómetros al sur de Quito, inició su actual proceso eruptivo en 1999 y desde entonces ha intercalado periodos de gran actividad con lapsos de relativa calma.