La caída de ceniza que arrojó el volcán Cotopaxi trajó problemas en los vuelos que llegaban o salían de Quito. Varios usuarios se quejaron de la cancelación y retraso de los mismos.

Sin embargo, la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) informó que las operaciones en el Aeropuerto Mariscal Sucre de Quito no fueron suspendidas tras registrarse cuatro explosiones freáticas en el coloso.

De acuerdo a informes de la DGAC, la presencia de material volcánico era en la cabecera sur de la pista aérea. Esto obligó a la concesionaria Quiport a reorganizar el ingreso y salida de las aeronaves por la cabecera norte, para así precautelar las operaciones aéreas.

El Comité Coordinador de Crisis del aeropuerto decidió emitir una alerta de precaución  en el aeropuerto y mantiene reuniones permanentes  para analizar la evolución de la actividad del volcán.

La DGAC emitió un NOTAM (información aeronáutica) a las aerolíneas nacionales e internacionales para evitar congestionamiento en las aerovías y minimizar las demoras en los arribos y salidas desde el aeropuerto de Quito.

Frente a este fenómeno natural las aerolíneas tienen la potestad de desviar sus vuelos a aeropuertos alternos si la situación lo amerita. Durante el día en las cuentas oficiales en Twitter de la DGAC y el Aeropuerto se ha informado de retrasos, desviación de vuelos, así como cancelaciones.

La Dirección de Aviación Civil indicó más temprano en un boletín que las operaciones aéreas en el aeropuerto Internacional Cotopaxi se desarrollan con normalidad, ya que no existe presencia de ceniza en la zona por que los vientos están en dirección noroeste. (I)