Partido Social Cristiano aún no completa firmas para inscribirse
Ayer en el Centro de Exposiciones Quito continuó el proceso de revisión de rúbricas de las organizaciones inscritas. El Partido Social Cristiano (PSC) alcanzó 130.811 rúbricas válidas y 47.712 firmas inválidas. Con estos resultados preliminares, a ese partido le faltarían 27.135 firmas para completar su inscripción. Sin embargo, 57.518 nuevas firmas aún están por revisarse.
En cambio el movimiento Madera de Guerrero contó con el número de firmas necesarias y logró inscribirse. La tienda política, que es liderada por Jaime Nebot, obtuvo 87.158 rúbricas y necesitaba sólo 37.641.
A las 15:00 se inició el proceso de verificación de firmas de Equidad i Oportunidad (Equipo), movimiento encabezado por Fabricio Correa. Este proceso de verificación se realizó sin la presencia de veedores de dicha organización, pues su dirigente se negó a enviar observadores.
Hasta el cierre de esta edición continuaba la verificación de firmas de ese movimiento, que entregó 279.037; de ellas se estarían revisando 142.289 adherencias.
Correa anunció que hoy acudirá al CNE junto a una jueza, quien, según el activista político, avalará sus firmas. Será recibido por el departamento de Asesoría Jurídica del órgano electoral.
En la mañana, en cambio, Wilson Sánchez, dirigente del Partido Renovador Institucional Acción Nacional (Prian), acudió a las oficinas del CNE en Quito y entregó 18.000 nuevas afiliaciones, que se sumarán a las más de 500.000 rúbricas que entregó la agrupación política.
Los Ejercicios de relajación estimulan a los verificadores
La relajación tiene su espacio en la ardua rutina de los verificadores de firmas que trabajan en el Centro de Exposiciones Quito, bajo la responsabilidad del Consejo Nacional Electoral (CNE).
Los 750 verificadores, que indexan y verifican las rúbricas presentadas por las diversas agrupaciones políticas tienen, durante el primer turno (desde las 07:00 hasta las 15:00), un intervalo de cinco minutos para estirar sus extremidades, mover la cabeza, inhalar y exhalar.
Cerca de las 11:00, la voz de uno de los supervisores del proceso se escucha en el canchón, en el que hay diez mesas de trabajo con más de 700 computadoras. Él invita al grupo de verificadores (conformado por jóvenes universitarios, amas de casa, desempleados, hombres y mujeres) a ponerse de pie para retomar energías y aumentar la productividad en sus tareas.
Una vez que termina la rutina, los verificadores se sientan nuevamente y continúan su trabajo hasta las 13:30. A esa hora salen a servirse su almuerzo, en un comedor ubicado a pocos metros de su lugar de trabajo.
Los grafotécnicos comprueban que la labor de los verificadores se realice correctamente. Los expertos en la revisión de firmas también trabajan en dos turnos: 80 lo hacen en la mañana y tarde, y otros 80 en la tarde y noche.