Para mañana está previsto que el presidente Rafael Correa inaugure el puente sobre el río Quevedo, que contribuirá a mejorar la vialidad en el cantón del mismo nombre y en el resto de la provincia de Los Ríos.

La obra lleva el nombre del ex asambleísta, Humberto Alvarado Prado, quien impulsó la ejecución del viaducto. Fue en un gabinete itinerante que el legislador le propuso al Primer Mandatario la construcción del puente.

El gobernante, consciente de que el viejo puente ‘Velasco Ibarra’ y el del ‘Sur’ no abastecían el flujo de vehículos, aceptó la propuesta de Alvarado, quien ya había elaborado una maqueta de la obra.

El Consorcio Ecuatoriano de Puentes emprendió la construcción de la obra. Para ello  expropió los terrenos adyacentes a las riberas contrapuestas, tanto del lado de Quevedo,  como de la parroquia San Camilo. En este último punto se asentaba el Mercado de Víveres del Sur -actualmente reubicado a la espera de sus nuevas instalaciones-, en una parte del malecón Simón Bolívar.

Según el ingeniero Hugo Valle, director provincial del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) de Los Ríos, se cumplió con los plazos previstos, a pesar de ciertas peticiones de la Alcaldía y de que estaban fuera del cronograma de trabajo, como la construcción de tres accesos o calles del lado de Quevedo, obras que, igualmente, redundarán en beneficio de la ciudadanía.

“El objetivo fundamental de esta obra, de un valor aproximado de 15 millones de dólares, es el de descongestionar el tránsito en el centro de la ciudad, más allá de que también es un enlace entre la Costa y la Sierra, lo cual favorece enormemente el comercio y otras actividades entre las dos regiones", asegura el funcionario. Valle destaca que en la construcción se utilizó mano de obra y tecnología ecuatorianas.

El viaducto sobre el río Quevedo, al que la comunidad ha denominado el “tercer puente”, tiene dos torres de 50 metros de alto en la parte central -tipo Golden Gate-, atravesadas por dos vigas de equilibrio o niveladoras.

Posee 154 metros de largo por 20 de ancho y cuatro carriles, con una zona para el paso de los peatones en los laterales. Es de tipo segmental y ha sido construido con hormigón postensado.

Tiene la capacidad para aguantar un peso de 240 toneladas, cerca de 20.000 carros al día, y su mantenimiento, en una primera fase, estará a cargo del MTOP, hasta que la Municipalidad asuma ese rol.

Asimismo, cuenta con señalizaciones de tránsito y 36 tirantes que reflejan la luz azul que reciben de dos reflectores, además de 20 postes con faros de 600 megavatios. El encendido es automático, a partir de las 18:00.