Expertos del clima de América del Sur pronostican un fenómeno climático de El Niño de características leves
“Las probabilidades de que se desarrolle el fenómeno climatológico El Niño han disminuido considerablemente, sin embargo, eso no significa que se pueda descartar totalmente que vaya a ocurrir”, señaló Juan José Nieto, representante de Servicios Climáticos del Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno del Niño (CIIFEN).
El pronunciamiento de Nieto forma parte de las conclusiones del primer Foro de Perspectivas Climáticas para América del Sur que finalizó este viernes en la sede del CIIFEN en el centro de la ciudad costera de Guayaquil.
El evento reunió desde el lunes a expertos del clima de los diez países de América del Sur, quienes analizaron las condiciones atmosféricas de los océanos Pacífico y Atlántico para los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2012.
“Entonces, de los análisis que se han hecho de la temperatura del mar de los dos océanos, se ha establecido que el calentamiento que se observó meses atrás (y que hizo prever la llegada de un Fenómeno El Niño devastador), ha disminuido”, dijo Nieto.
El vocero del CIIFEN estimó que de presentarse el fenómeno climático, este sería de características leves y no como el que se presentó en 1997. Las lluvias se presentarían a finales de diciembre o en los primeros días de enero de 2013.
“Eso no significa tampoco que las lluvias no vayan a existir. Pueden que sean normales o ligeramente intensas”, advirtió, al tiempo que descartó que la proximidad de El Niño tenga que ver con las lloviznas caídas en estos días.
Nieto recordó que los centros mundiales de pronósticos del clima determinaron un aumento de la temperatura en la mitad del océano Pacífico.
El experto mencionó también la existencia de otros elementos atmosféricos que influyen en las precipitaciones fluviales, entre ellas la temperatura del océano Atlántico, El Caribe o las presiones atmosféricas en Bolivia o la Amazonia. “Entonces, El Niño y el (calentamiento del) océano Pacífico no son los únicos que pueden causar un fenómeno atmosférico”.